tag:blogger.com,1999:blog-167341222024-03-08T01:28:21.787+01:00BABILONIADaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.comBlogger299125truetag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-89389314838027858112013-05-10T12:00:00.000+02:002013-05-10T12:00:02.332+02:00300<br />
Cuesta llegar a los finales y todo lo que empieza tiene que acabar pero no quería despedirme de Babilonia sin dejar el principio de algo que sera mas grande y quizás le de otro fondo y formato y termine siendo otra cosa, como ha nacido en este tiempo es justo que sea aquí donde empiece.<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdOgjXZpm9xJDdBcQnOTc87XPRthZLYVQlcNE67YZ4CpiLMHXg_W75r6nH9LhCFXvKj9cH4-TMD2I7siBTTMMLJ587HJ7kIjO9AY-x2L7DWOZ_EsTWLLgENpQxdhmDxN-Rez8MCQ/s1600/IMG_6522.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgdOgjXZpm9xJDdBcQnOTc87XPRthZLYVQlcNE67YZ4CpiLMHXg_W75r6nH9LhCFXvKj9cH4-TMD2I7siBTTMMLJ587HJ7kIjO9AY-x2L7DWOZ_EsTWLLgENpQxdhmDxN-Rez8MCQ/s400/IMG_6522.JPG" width="400" /></a></div>
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<span style="font-size: x-large;">Sin orden, ni planteamiento</span><br />
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Prologo<br />
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El A319 se reflejaba en la pista proyectado por la potente iluminación que procedía del hangar, durante la tarde había llovido de forma suave y en el aire quedaba suspendido el olor a humedad, se acomodaba en el desagradable olor de los escapes de multitud de coches que a duras penas lograban avanzar en la avenida saturada. Ese olor se me había quedado alojado en el fondo de la garganta igual que la imagen se resistía a abandonar mi retina, quedaba prendida en mi cerebro como un post it clavado con una chincheta en el tablón de anuncios. Resaltaba el amarillo chillón en esa serpenteante línea multicolor en la que el día se desvanecía como pinceladas dadas en un lienzo en lo que nada se quiere resaltar y el horizonte te adelanta sin terminar de visualizar el mensaje que el artista quiere transmitir. Me sentí forastero en la ciudad como si sobrase en el recuento de final del día. Pensé que en la ciudad mas cosmopolita del mundo todos teníamos cabida sin tener que tener una habilidad especial, pero lo que al final descubrí es que era como todas, necesitas de tiempo, de visitas, de que te abrume con su aliento para que te empape su olor y poder vestir así ese habito que te confiere el sentido de propiedad, de poder ocupar un lugar sin ser ajeno a los rayos del sol. Ver el cemento libre, sin coches había sido una liberación de alguna manera, la tranquilidad emanaba desde el cómodo asiento del potente vehículo que me había llevado hasta allí y se propagaba por el amplio habitáculo, se me antojaba que salir de allí no era una buena idea, en el trayecto desde la oficina me había quedado adormilado, vigilando el trasiego de las gotas de lluvia sobre el cristal, sus carreras imposibles, su destrucción anticipada, me recordaban las vidas que transcurren zigzagueando, esquivando problemas, horadando el perfil, juntándose con otras creciendo y al final desapareciendo, la vida en si misma reducida a su mínima expresión. Al abrir la puerta sentí el aire frío empujando la lluvia que me restregaba por la cara, una despedida en armonía con mi corto viaje, lluvia, frío, nieve, lluvia hasta el final, llegue mal, las cosas salieron mal y la despedida también estaba mal, el suave zumbido de los reactores desviaban mi atención devolviéndome al momento, a veces se notaba la ráfaga caliente que producían y se mezclaba con el viento frío y llegaba a mi como un torbellino dispar. Paige se mantenía impertérrita a mi lado en silencio, parecía acostumbrada a la inclemencia del tiempo o simplemente sabia estar en la ocasión. Mantenía en alto su mano con mi maletín y aguardaba a que lo cogiese o le dijese algo, me di cuenta de su gesto impertérrito que quería alojar una mueca de disgusto y me aproveche del momento alargándolo, disfrute ese instante de incomodidad por su parte, no muchas veces sacaba de mi la vena sádica, no por lo menos en momentos cotidianos pero a veces necesitaba un golpe de optimismo o por lo menos de satisfacción. Pero ni aun así se me levanto el animo, sabia que había sido desagradable por no decir grosero en esa tarde y a ella le había tocado pagar mi hosquedad, no tenia ganas de enmendar mi actitud, ni lo creía necesario ni creía que eso pudiese enderezar la contradictoria visita, sabia que habría otros días en que mi animo estaría diferente y ella estaría cerca, era su sino, ejercer de niñera, secretaria, chofer, compañera, amiga, cuando yo llegaba a la ciudad, la consideraba mi niñera y lo hacia bien. Sabía estar en su sitio en cada momento, era eficaz, a veces se adelantaba a mis deseos y era capaz de encontrar cualquier cosa que le pidiese, por descontado que mi presencia mejoraba en su compañía y se abrían puertas que de ir solo costaría más. Me despedí con un ligero beso demasiado frío en la mejilla sin palabras, se me había contagiado la frialdad del tiempo y me encamine a la escalerilla del avión. Mi forma de actuar la pilló por sorpresa y tuvo que correr tras de mi para darme el maletín, me alcanzo cuando ya empezaba a ascender y sin decir nada me lo acerco, lo tomé con la mano derecha y continúe mi camino. El piloto esperaba arriba con mi pasaporte en la mano, me saludo con efusividad y me dijo que estaba todo arreglado y podríamos partir cuando lo ordenase. Tras el se vislumbraba un espacio amplio, no daba la impresión de ser tan espacioso desde fuera, fue como un bálsamo ver el tapizado del suelo oscuro y las butacas amplias de piel brillante blanca, cambio mi cara, incluso el animo y de alguna manera me sentí de nuevo activo, jovial, me gire con rapidez para despedirme de Paige, se me pasó por la cabeza bajar corriendo tomarla en brazos, alzarla y llenar de besos su cuello, sus mejillas y palpar sus carnes prietas, me contuve levante la mano desde arriba de la escalerilla queriendo saludar en un gesto exagerado, llamando la atención y poniendo en ese gesto toda la simpatía que pude recolectar, pero Paige se había girado ya y subía al coche de espaldas a mi, no vio mi gesto ni mi cambio talante por lo que pueda parecer tampoco me contrarío ese momento y seguía estando animado cuando la vi alejarse dentro del vehículo. Al entrar de nuevo cerraron la puerta, me acerque hacia uno de los sillones me senté, me afloje la corbata y sentí el jet desplazarse por el suelo con suavidad hacia la pista de despegue. Era fácil buscar acomodo en un espacio como ese, el asiento te abraza con delicadeza haciendo gala de una suavidad perdida ya en el tiempo, que diferencia con el viaje de ida en vuelo regular, duro, áspero y lleno de voces elevadas, era notable la diferencia. Pensaba en eso cuando me di cuenta que a mi lado estaba una mujer, rubia, con el pelo rizado cayendo por el costado de la cara, inclinada hacia mi, me preguntaba algo y yo seguía pensando en la soledad del otro avión entre 300 personas que se afanaban en acomodarse cada uno en su universo particular. Supuse que seria personal de abordo y me ofrecería alguna bebida, o se pondría a juguetear con los brazos indicando las salidas de emergencias y que hacer en caso de cualquier contratiempo. Pero no, en este tipo de aviones nadie te molesta con eso, al contrario te miman y me invitaba a seguirla hacia otro asiento mas cómodo, me dio por pensar en la comodidad y ya me encontraba suficientemente bien como para cambiarme, pero la seguí en un acto de dejarme llevar, le hice caso, creo que era por aparentar que era ducho en viajar de esta manera, no quería que se notase que era la primera vez para mi en un Jet Privado.<br />
-Viajara solo? Me preguntó, la notaba tensa como queriendo escapar de mi respuesta.<br />
-Si, solo, esperabas a mas gente? La tutee, no se si por aproximarme o por dejar espacio abierto entre ambos, sabia que ella seguiría con el usted y eso me gustaba.<br />
-No, no, pero pensé que el Sr. Yáñez volvería, como llego con nosotros y me dijo que también volvería. Dejo colgado el comentario alargando la frase, esperando una aclaración, su mirada se torno rabiosa, doblegada y rabiosa.<br />
-Tienes algo con el?<br />
Iba explicándome que en la aeronave cabían 16 personas cómodamente alojadas, contaba de un espacio para viajeros con asientos, el que yo veía, una sala de estar, una cocina y un par de habitaciones para descansar en los viajes demasiado largos u otras cosas según la necesidad, note que recalcaba estas palabras y vi en ello una invitación velada a que me rebajase la tensión acumulada en las ultimas horas. Eso si que era un mantra y estaba seguro que lo repetía a cualquier viajero que subía al avión, se lo habían enseñado bien y ella lo repetía. Quería esquivar así mi pregunta, dejando un tema personal y cambiándolo por la comodidad que me ofrecía, no me importo seguiría mas tarde insistiendo. Tenia la sonrisa fácil, de gesto amable y una dicción muy cuidada se sentía placer al escucharla, el aparato empezó a tomar velocidad e insinúo que seria mejor sentarnos, no se encendió ningún cartelito de abróchense los cinturones, ni ninguna grabación interrumpió el sonido del aire atropellado, solo un zumbido creciente mientras se ascendía con comodidad y rapidez. Quedaban siete horas que pensaba pasar descansando. Volvió a mi lado la chica cuando el aparato se nivelo y la velocidad ya era constante, me fije en su figura, las caderas se marcaban en una falda de tela azul, en la cintura se recogía la camisa blanca resaltando su estrechez, arriba los pechos se mostraban generosos y un pañuelo de cuello con motivos ecuestres ocultaba la piel que dejaba al aire unos botones exageradamente desabrochados, cosa que me había pasado desapercibida en el primer momento, quizás por que permanecía despistado por el derroche de buen gusto con el que habían decorado el avión. Ahora ya mas centrado y con la seguridad de conocer lo desconocido podía centrarme mas en ella. Me ofreció ahora si, algo para beber, y ya que había quedado deslumbrado por el lujo tenia que comprobar si solo era fachada o también persistía en el interior. Islay con hielo me salio espontáneo y desde dentro, como quien reza una oración sin tan siquiera pensar en ella. Vi como se alejaba me levante y la seguí, en un lateral en semicírculo había un sofá acorde con los demás asientos, cuero blanco, de unas cuantas plazas frente a un televisor de pantalla plana de grandes dimensiones. Abrió un armario y saco el vaso y la botella, y de una cubitera que supuse que había llenado momentos antes del despegue una gran esfera de hielo que encajaba a la perfección en el interior del vaso, lo cubrió con el liquido y me lo ofreció, quede sorprendido por su bien hacer. Le pregunte por que el hielo era una esfera, lo hice por buscar un fallo en la perfección, imaginando que no sabría el por que y lo hacia por que así se lo habían dicho, aunque pensé que si sabia que era un Islay sin preguntar, también sabría el por que del hielo, aun así continúe me apetecía escucharla hablar. Se sonrojo levemente, fue un flash que cruzo por su cara, su mirada no le encajaba, tenia demasiada soltura como para ponerse nerviosa por algo tan nimio, pero aun así se lo note y la marco. Empezó a parecerme interesante y comprendí que el sonrojo fue por que le pregunte el porque, estaba acostumbrada a hacer lo que le ordenasen pero no a entablar conversaciones o responder preguntas sobre sus habilidades o conocimientos. Carraspeo despacio ahuyentando un gorgorito que seguramente pensó que había quedado anidado en su garganta, respiro hondo, tanto que su pecho se agito frenético, intentaba refrenar su verborrea de eso me di cuenta, quería ser concisa y rebuscaba las palabras para no extralimitarse en su definición, me gustó.<br />
- Las esferas de hielo, aportan el mismo frío que los cubitos normales Señor con la particularidad que tardan mucho más en derretirse por lo que la bebida no se agua.<br />
-Bien, perfecto, se nota que entiendes de bebidas.<br />
-Trabajo ahora en un Restaurante en Madrid antes trabajaba en otra cosa pero no es de interés en este momento, he ido aprendiendo, lo poco que se, fijándome, preguntando cuando no sabia y poniendo todo el interés del que soy capaz en aprender.<br />
-Y que haces aquí, en vez de estar en tierra firme?<br />
-Una amiga hace unos meses me hablo del trabajo, me dijo que me podía interesar, pagan bien y no me trastoca mucho los planes, cuando ella no puede yo la sustituyo.<br />
-Antes te preguntaba por Yáñez, tienes algo con el? Volvió a sonrojarse, esta vez si que note que estaba pasando un mal trago.<br />
-Es fácil hablar con Usted.- intentaba de nuevo esquivar la pregunta,-H asta ahora en los viajes que he realizado, mi trabajo ha sido escuchar, servir y ...- dejo la frase colgada, supongo que para que la terminase con mi imaginación.<br />
-Y?- lo pregunté poniendo mucho énfasis a la Y- Creo que a partir de ahora viajare bastante con vosotros. Así que dejemos las cosas claras desde el principio, me gustan las cosas claras, me gusta saber donde estoy y con quien estoy. Tardó tiempo en reaccionar, vi de nuevo su pecho agitarse, vi la zozobra reflejada en su gesto, supuse que no debía ser fácil decir abiertamente cual es tu cometido cuando se da por hecho que todo el mundo lo sabe.<br />
-El sueldo es alto, y claro, es alto, no por que sepa poner copas, eso lo sabe cualquiera, no por que sea agradable, que también, ni por que tenga buen cuerpo, aunque eso también cuenta y por que hable varios idiomas.- Cuidaba las palabras midiendo los tiempos, bordeando lo evidente. Dejaba que su rabia, su vergüenza se diluyese- Con nosotros viaja gente importante, jefes de la empresa, invitados que movemos de un lado a otro, algunos son simpáticos, pero casi todos son, ... -Me miro con rudeza, levantando un velo que protegiese sus facciones de la frialdad del propio gesto.<br />
-Cabrones? Termine yo su frase. Resoplo esta vez sin disimulo como si se quitase un peso que llevaba tiempo encogiéndola.<br />
-No quería decir eso, pero si mas o menos.<br />
-Ósea que si a mi me apetece que me la chupes, tu estas disponible?, si me apetece follar vendrás cuando te llame? Si quiero jugar contigo, dirás a todo que si?<br />
-Si.- Fue una respiración nimia, sin vocales ni consonantes, un silbido que se escapaba sin querer confirmar la respuesta.<br />
-Y con Yáñez, que? Desplace el tema hacia otra vertiente del mismo caso, lo sabia, pero era el momento de descubrir si me apetecía embarcarme en una nueva historia. La chica me gustaba, su aspecto, era saludable como diría mi abuela, te conviene niño, tiene un aspecto saludable, aunque traducido quería decir que tenía buen cuerpo y era guapa y parecía honesta. Me gustaba su actitud, se veía que tenía tablas y su voz aterciopelada me acariciaba antes de llegar. No era yo persona de un encuentro fortuito, de un polvo y si te he visto no me acuerdo. Me gusta la posesión, si follo, follo por que es mía, si me acerco es por que me pertenece. Así que o encajaba en mi o dormiría hasta llegar a Madrid.<br />
-Con Yáñez? pufff..., es un directivo de rango medio, asqueroso, baboso, me da grima cada vez que lo veo mirándome, no me importa acostarme con gente, el sexo es algo que me gusta y disfruto y si encima me pagan mas por ello no seré yo quien le haga ascos, pero hay personas, no se por que no me encajan, no por que sean mas o menos guapas, porque tengan mas o menos peso, el es una de ellas, tiene un gesto que parece estreñido y siempre quiere quedar por encima de sus compañeros. Hasta ahora me había librado por que había viajado con gente por encima de el, pero en este viaje de vuelta, el seria el de mayor rango. Me lo fue recordando a escondidas cuando vinimos. A la vuelta no te libras, zorra, te voy a follar hasta que me canse, la leche te va a salir por la boca. Y lo cierto que esas guarradas dichas así, robadas al oído de los demás me excitaban, pero después lo miraba a la cara y todas las ganas que había ido embotellando con sus palabras estallaban de golpe esparciéndose por todos los lados. Lo peor era que me había dicho que seria el último viaje para mí, que en cuanto volviésemos daría parte de mí para que me echasen. A no ser claro que me portase de una forma tan excepcional que se lo hiciese olvidar. Ya ve, ahora que mi vida volvía a encarrilarla, que había puesto al día la hipoteca y que tenia por fin un golpe de suerte, un asqueroso me la puede chafar, Joder. -Sus ojos se crisparon formando una película acuosa que emborrono por un momento su mirada.- Se que no debiera haber dicho esto, que me juego el puesto si el no me lo ha jodido ya, pero no me puedo aguantar, me da rabia que gente como el puedan manipular el futuro de otras personas, y como se que me despedirán en cuanto el hable pues que mas da, me desahogo. Se le entrecortó la respiración con un sonido que quería ser llanto, un llanto domesticado.<br />
-Por que me cuentas con tanto detalle?<br />
-No me ha dicho que quería las cosas claras? Ya sabe un poco mas, ya sabe que hago aparte de servir copas. Por que no esta Yáñez en el avión? Hizo uso de toda su desfachatez quizás por nerviosismo para hacer la pregunta.<br />
-Te podría decir muchas cosas para hacerte sentir bien, pero si te digo la verdad no tengo ni idea de quien sea ese Yáñez.- La note derrumbarse por un momento. Aproveche la ocasión. -Quítate la blusa. Me miro de refilón aguantando al bies mi mirada, pero la quito sin decir nada, como había supuesto no llevaba sujetador, el pañuelo se acomodaba entre los pechos, y la ligereza de los movimientos con que se desplazaban era hipnótica. Caían ligeramente, apoyándose sobre la piel y los pezones apuntaban hacia arriba dándoles una forma apetecible, me gustaron, me gustan las tetas que penden, que se balancean al son de la respiración.- Pero si te puedo asegurar otras cosas, entre ellas que el no te molestara mas, yo me encargare de eso, me voy a hacer cargo de la empresa y es posible que las cosas cambien. Suele salir el piloto?<br />
-No, si no se les llama, no pasan de la parte delantera, ahí ellos tienen todo, su cuarto de baño, un pequeño office por si les apetece comer o beber algo.<br />
-Me gusta verte con las tetas al aire, iras así hasta que lleguemos a casa. - Me miro fijamente, manteniendo mi mirada por un momento, no duro mucho, sabia que para eso estaba y no le importaba, la temperatura era agradable la estancia cómoda y al parecer la compañía buena. -Hay dos tipos de persona, bueno hay mas, pero yo creo que se pueden dividir en dos, las que se mueven por el empuje de sus sentimientos y las que se mueven jaleadas por artificios externos de que tipo de personas eres tu? Quedo pensativa, huida de sus propios pensamientos, tuve la impresión que en ese momento hacia un balance de su vida, que en esa escasa fracción de tiempo pudo poner toda su vida en una balanza y se percibía en el devenir del fiel que oscilaba sin parar de un lado a otro.<br />
-No sabría decirle, parece una tontería y en cuanto me he puesto a racionalizar la pregunta, me veo empujada por mis sentimientos pero enseguida me descabalgan, el piso nuevo, la ropa de marca, los zapatos de Jimmy Chooo, me permite pensarlo y contestarle mas tarde, me ha quedado la impresión de que debo paralizar mi vida, frenarla por completo y comenzar de una forma nueva.<br />
- Tenemos tiempo, no te preocupes, ya me contestaras mas tarde. Quítate la falda.<br />
Este no es el principio de esta historia, y lo suyo es empezar las cosas por el principio.<br />
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Capitulo 1<br />
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La vi por primera vez un día en el que la tarde mataba un mes de abril, sonreía como lo saben hacer unos labios jóvenes, se desprendía de ese gesto un calor que por un momento me hizo olvidar que hacia allí. Su nombre empezaba por I, escribirlo entero puede parecer aún una temeridad, adelantaba la imagen que automáticamente formas en tu mente cuando lo escuchas como un tópico advenedizo, era alta, delgada, quizás demasiado delgada con proporciones perfectas de una anatomía esculpida a golpe de gimnasio, su cabello rubio reflejaba el sol del atardecer que hacia que prendiese en llamas como el reflejo de una forja que trabaja el hierro, un color hipnótico que impedía retirar tu vista de ella, su piel era muy blanca parecía recién amasada, tierna y el gesto de su cara era desvalido como si con el inquiriese de ti una afecto especial, quizás por que el ojo derecho de un azul aclarado que se abría como el de una gata se desprendía un poco de su orbita, casi imperceptible pero lo suficiente para hacerse notar. Todo en ella tiraba hacia el norte, hasta la luminosidad que proyectaba parecía desprendida de una tormenta de hielo, de estar callada podría decirse que era nórdica, pero hablaba y lo hacia de forma elegante pese a su juventud buscaba el vocabulario adecuado para la ocasión y le otorgaba una métrica que sin querer hacia encajar las frases en las conversaciones de la misma manera que la voz de una soprano encaja en la partitura que en ese momento el piano desliza a tus oídos tras largas tardes de ensayo, se distinguía un deje de gente bien de Barcelona. La inteligencia desperdiciada que me trasmitía se me hacia grande, siempre he pensado que la inteligencia debe ser algo bueno, algo que favorezca la vida de los que te rodean, una manera de hacer felices a los tuyos y no utilizarla en beneficio propio en un ejercicio de egoísmo continuado. Era la segunda vez que yo iba de visita, igual que la primera esta también me vi obligado a viajar hasta allí. Por el patio del centro deambulaban almas que parecían calzarse cuerpos que a casi todas les quedaban grandes, por mucho que mirases no encontrabas ningún cuerpo, la mayoría bellos, que se ajustase a su portador. Te daba para pensar que hacían allí todas esas personas, jóvenes en su inmensa mayoría que habían consumido la vida antes de sin tan siquiera saber a que sabia, esnifada con prisa y sin ningún sentido. Era la hora de visita y unos, los que llegaban se afanaban en esquivar a otros, los que no se podían marchar. De no saber el lugar en el que estaba, cualquiera hubiese pensado que era un hotel de categoría especial o a lo sumo un lugar donde retirarse a meditar y descansar con clase, piscina cubierta y descubierta, pista de tenis, salón de juegos, gimnasio completamente montado, jardines cuidados con esmero, la limpieza era tan extrema que no se veía ni un triste papel esperando que levántase un vientecillo y poder revolotear a su anchas por el patio. Mi sobrino H, también de momento me mantendré en su inicial, sucumbía por cuarta vez en la categoría especial y las puertas se iban cerrando a su paso en su permanente huida de las responsabilidades, chantajeaba con besos, convencía con carantoñas hasta que los desmanes quedaban olvidados, cuando todo volvía a la normalidad y las defensas bajaban el volvía otra vez a su andadas, su madre rendida cedía y dejaba correr el tiempo suficiente hasta el próximo envite, luchadora, iba perdiendo sus fuerzas y hundiéndose en un páramo que a ratos yermo se oscurecía. Me quedaban ya pocas cosas por ver, pocos cuentos que escuchar, pocos motivos por los que dejarme convencer pero aun así y parapetándome tras los muros de mi seguridad me soltaron una andanada nueva que por un momento me hizo tambalear y me adelanté incluso a la noticia que debía trasmitir. Con su voz encantadora I comenzó la charla intrascendente, elogiando el buen gusto al vestir de una señora que pálida eludía la compañía de BM aunque BM malamente podría ejercer cualquier tipo de compañía, permanecía postrado en una silla de ruedas con la mirada gris, de un gris opaco, muerto, dirigida al infinito, un infinito que para el caducó por lo menos un año antes. I, seguía zalamera, no sabia a cuento de que venia esa muestra de afecto a un desconocido, efusiva como si quisiera redecorar una habitación oscura, de cercanía como quien baila un chotis sin salir de la baldosa, pese a sus medidas palabras y la musicalidad de su conversación me sentí acosado pero de una forma tan elegante que no me importó. H seguía sin aparecer y el tiempo corría, me habían dicho al entrar que ya lo habían avisado que enseguida aparecería. Me dejaba acompañar por ese manojo de virtudes, un ramillete variado que con su sonrisa terminaba de convencer a cualquiera que pudiese dudar de su buen hacer. Hablaba a la perfeccione el ingles y el francés, tocaba el piano con maestría, estudiaba arquitectura, conocía los clásicos y era capaz de recitar pasajes de Homero. Vestía con una disimulada modestia que te hacia dudar, los vaqueros encajaban a la perfección en su culo escuálido para mi gusto pero buscado seguro por la mayoría de las mujeres, parecían unos vaqueros desgastados por el uso pero al ver la discreta etiqueta te dabas cuenta que pese a los andrajos en los que parecían convertidos estaban recién comprados, encima una camiseta insinuante, de un color indefinido entre gris y crema que también parecía puesta a la casualidad encajando su factura a unos pechos incipientes arropados y aumentados por un sujetador con florecillas lilas y encaje final del mismo color que a veces dejaba ver el escote en V, el punto de seda te decía que de casual no tenia nada y era mas probable que fuese un producto de la causalidad y no de la casualidad el que vistiese así. Jugaba todas sus bazas y las jugaba bien, acaba de conocerla y ya casi había caído rendido a sus pies, su inteligencia embaucadora me atrapaba aunque sabia que no se había acercado a mi por ser yo quien soy, su acercamiento se debía a otro motivo y estaba ansioso por descubrirlo aunque no tenia prisa y me dejaba seducir como un galán en un respetuoso cortejo. Se me paso por un momento que su acercamiento se debía a que buscaba en mi una puerta de salida del centro y al no haber mucho transito de gente había decidido que yo fuese su presa, por un momento me sentí halagado y recreaba babeando la refriega con ese cuerpo joven y duro. Enseguida desistí pues aunque la presión era discreta y continuada no pasaba de ese acercamiento, no daba el paso para además de embaucar seducir y de ahí mi prudencia. No tenía más que hacer que disfrutar del sol de poniente sobre la loma que daba al mar con su caricia lejana y esperar, esperar a que H apareciese y me dijese cual era el motivo de su llamada. Como suele suceder en conversaciones intrascendentes, lo importante va buscando un trasfondo donde alojarse y esperar el momento en el que salir a la luz sorprendiendo así de una manera casi casual pero la mayoría de las veces buscada, aparentando doblegar la conversación plegarla al momento en que lo intrascendente se va disipando y la conversación llega a un matiz que casi podría decirse escrito con esmero dentro del guión y lo sueltan dejando que salga a la superficie con tanta ligereza que no te das cuenta de lo que han dicho hasta bastante rato después. Por un momento perdí la conexión con mi interlocutora, no por que me pareciese desagradable o repetitiva, sino por que el sol me pillaba a contraluz y difuminaba su silueta sobre el fondo dorado en el que se habían convertido las placidas aguas del mar y rompió mi conexión no solo con ella sino con todo el mundo y mi mente comenzó a vagar dentro de un marco idílico que dibujaba una ascensión etérea, como si su cuerpo levitase por obra y gracia de una santidad devenida. Intentaba luchar contra esa sensación pues me sabía perdido de proseguir por ahí, perdido sin saber en que, por que alguien que esta en un lugar como este tiene mucho de humano y muy poco de divino. En el deje momentáneo que adquirió su conversación como si se disipase en su autentico yo, me pareció distinguir la palabra embarazo que me llego lejana pues aún en mi retina la aureola que se había creado tras ella refulgía y mi despistada conciencia se adormecía. Reaccione y aun me preguntaba por que me decía a mi algo de un embarazo cuando fui hilando la trama de las últimas semanas, H había conocido a una chica maravillosa, joven y guapa, según su padre, estaba centrado y todo iba a la perfección, seguía el tratamiento ella le ayudaba por que estaba allí de paso, sin nada importante que curar, como si la gente tuviese que ir a un centro de desintoxicación por amor al arte. Se mentía como quien se hace trampas jugando un solitario, una mentira de autocomplacencia o quizás ya de ilusión. De una ilusión que al pronto se veía truncada por la siguiente realidad como cuando terminas la partida de tu solitario sin vencedores ni vencidos, la realidad vuelve y H jugaba con ella saltándose todas las reglas. Me pareció de tal calibre esta nueva estratagema que no pude articular palabra durante un rato, no sabia que decir, no sabia si darme por enterado o esperar a que me repitiesen la noticia o dejar quizás que se olvidase y terminar la visita y marcharme sin haberme enterado de lo que me habían dicho. Me llego de golpe la certeza de que I salía con H y este la había enviado para allanar el camino, para suavizar lo que tenia que comunicar a sabiendas que a ella le seria mas sencillo enfrentarse a cualquiera de nosotros sin la responsabilidad de ser familia y con la ventaja de la prudencia que le otorgaríamos por desconocida, supe en ese momento que H no aparecería en esa visita, esperaría a las siguientes cuando tuviésemos la noticia mascada y tragada. Habían abierto ellos solos su propia puerta de salida, seria cuestión de tiempo que los abuelos por su educación o costumbres arraigadas impidiesen que su nieto o nieta naciese en un centro como ese y así también evitar dar pie con ello a las habladurías de la gente. Utilizando una vida no nacida esperaban, o sabían que los sacarían de ahí mimándolos y volviendo a la normalidad como si todo lo ocurrido anteriormente lo pudiese enjuagar el nacimiento de un ser inmaculado, como si esa personita fuese capaz de enmendar todos lo errores cometidos por ellos hasta el momento. Me sentí indignado, tanto, que fue para mi un alivio el sentirme solo el portador de la noticia y no tener que ser el que decidiese, porque aceleraba el futuro y solo veía desolación abandono para esa criatura que inocente serviría para sacar a sus padres de una prisión que yo la hubiese querido para ir de vacaciones. Pensé de quien de los dos había partido la idea. A I prácticamente no la conocía lo poco que sabia de ella era lo que me habían contado y ese rato pasado en ese momento, pese a juventud era inteligente y embaucadora de eso no me cabía duda, pero también por su juventud debía estar familiarizada con métodos anticonceptivos, por lo que un despiste no había sido, era algo buscado. H era 12 años mayor que ella, buena planta, embustero hasta la saciedad y manipulador, también era muy inteligente pero a la contra que I no hacia ostentación de su inteligencia. Llegue a la conclusión que la falta de libertad le dolía mas a el que a ella, por lo que era el, el que había maquinado todo el plan convenciendo a I. Una vez lanzada la noticia supuse que el encanto también se disiparía y la visita llegaría a su fin, pero no fue así, I se sentía a gusto y seguía charlando, desplegando su simpatía y acercándome más a ella, note un ligero cambio en su vocabulario, era menos embaucador y mas seductor.<br />
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<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com8tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-50451581275418671732013-04-23T19:01:00.000+02:002013-04-24T10:51:04.506+02:00Apto para todos los públicos<br />
Hace algún tiempo, mucho según se mire, primero por mis sobrinos y después por mi hija, me dio por escribir cuentos, me veía yo mas como trovador o corre pueblos que como cuentista, y por lo visto lo de cuentista no lo hice mal, el repertorio fue aumentando pero llego un día, cosas de la edad, que en ellos se perdió el interés por historias que quizás ya sonaban infantiles o demasiado sencillas para seguir la trama. A la espera de que los hijos de los anteriores (cuando los haya) se vean interesados, esa fase quedo paralizada en mi, de esa época quedó uno, que por unas razones u otras nunca lo mostré a nadie. Hoy es un buen día para hacerlo publico y me apetece hacerlo aquí, es una de las facetas que tengo y rara vez hablo de ellas por que este blog lo cree para lo que lo cree y este tipo de historias u otras parecidas no caben, salvo ahora que llega a su fin y de alguna manera quiero que mi imagen sea mas definida.<br />
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<span style="font-size: large;">El Reino de las Nubes</span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhil8ZCT5LwWr-FUd6ll9z9Xb2mAgnJw5LPF9AyG9j_hdVmdYMjYZoLz-ffdzuBua6KVwhxcmSuXFc-6WMetR_vBC0KPCDOL262vPaR6C3EoxgGTgybnjtalSOkDvHxPrctTGJ3rg/s1600/kreo_tuchi_08.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhil8ZCT5LwWr-FUd6ll9z9Xb2mAgnJw5LPF9AyG9j_hdVmdYMjYZoLz-ffdzuBua6KVwhxcmSuXFc-6WMetR_vBC0KPCDOL262vPaR6C3EoxgGTgybnjtalSOkDvHxPrctTGJ3rg/s400/kreo_tuchi_08.jpg" width="363" /></a></div>
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Existe un Reino que casi podría decirse que es tan antiguo como el propio mundo, al principio era un caos, los truenos ensordecedores avasallaban cualquier atisbo de quietud, los relámpagos sacudían el cielo de una brutalidad tal que el descanso era imposible. Los señores que entonces comenzaban a despertar luchaban, se imponían y sucumbían ante los envites de los otros, se zarandeaban de tal manera que no había forma que nada creciese bajo ellos. Pero todo caos trae una calma y un nuevo orden, el más fuerte del momento se erigió Rey y así fue imponiendo la cordura a todos. Era tan basto ese Reino que tuvo que mandar a sus allegados a gobernar en su nombre en los mas diversos lugares, los mando a las grandes cumbres nevadas, los mando a las interminables extensiones llanas, los mando sobre los truculentos mares y los desapacibles océanos, los mando a las nieves perpetuas, a los áridos lugares del sur, a donde nacía el sol, a donde se ponía. Tras los primeros días de arrebatos y discordancias todos fueron aceptando su autoridad y la calma llego. No era un reino rico, ni tampoco pobre, a decir verdad tampoco necesitaban grandes cosas, el castillo en el que el Rey vivía era variopinto, tan pronto se erigían altas torres como estas se desvanecían formando grandes murallas, otras formas se alargaban tanto que la vista de un hombre era incapaz de abarcar en toda su distancia, otras sin embargo se asemejaba a un barco que navegaba en aguas tranquilas, se entretenía así pues el Rey en recrear cada día formas dispares, imposibles que se antojaban caprichos de una mente inquieta. El Rey encontró a su Reina y de su unión nacieron dos princesas, Anuak y Manu. Paso el tiempo en agradable armonía, Anuak la mayor creció zarandeada al principio por los envites que le hacían a su padre y vivió los últimos años de guerras antes de que el impusiese la paz, cuando creció se dedico a recorrer el reino visitando a los amigos que su padre tenia siguiendo la línea que el Rey había marcado, haciendo relaciones nuevas y aposentando con fuertes vínculos las viejas, conociendo así a los jóvenes en edad de casar. Manuk demasiado pequeña y ajena a cualquier sentimiento nefasto retozaba en el castillo que su padre cada día transformaba para ella alternando en sus diseños lineales otros de facturas imposibles para las leyes de los humanos y así pues el castillo tomaba forma de ave, o de montaña invertida o de algún animalillo curioso que se asomaba en los claros de los bosques asustados. Duró mucho tiempo la paz, tantos años que ni tan siquiera los hombres mas listos eran capaz de sumar, hasta que un día uno de los señores se alzó contrariado por que la princesa Aunak había pasado de largo sin hacerle una visita y con la rabia de ese despecho carcomiéndole las entrañas la secuestró. Aunak se sentía avergonzada aunque había ido a verlo, pero en las tórridas tierras del este el sol brillaba con fuerza y no encontró a nadie que le indicase donde encontrar a su Señor, así que continuo con su viaje mecida un poco en su orgullo de princesa y pensando que lo vería en su próximo viaje, pero por ella estallaría una revuelta después de tanto tiempo de paz y eso pensándolo fríamente y desposeída de su orgullo, le parecía imperdonable.<br />
Todos los Señores empezaron a recordar los viejos tiempos, cuando las peleas eran constantes y la intranquilidad los agitaba, empezaron a sentir una desazón que no querían revivir. El Rey amenazo, estallo en rabiosa cólera cuando se entero de la afrenta y del rapto de su hija, llamó a sus fieles, actuando con decisión y antes de que la revuelta fuese más numerosa, cayendo toda su furia sobre los que se habían levantado al amparo del secuestrador de la princesa. Fue tan dura la pelea que durante cuarenta días y cuarenta noches la lluvia caía anegando todo a su paso, el cielo se oscureció de tal manera que casi no se distinguía la noche del día, el nivel de las aguas creció tanto que sepulto casi todo y tan solo los árboles mas altos y las montañas mas elevadas permanecieron visibles y los hombres y mujeres corrieron hacia ellas para evitar una muerte segura. En el día 41 y ya sin fuerzas el señor que se había levantado estaba casi deshecho y aprovechando su ventaja el Rey dio su último mazazo y cayendo sobre el hizo que desapareciese por completo. La cordura volvió, todos los demás levantados sin el guía se fueron retirando hacia sus dominios y el sol volvió a brillar favoreciendo que las aguas descendiesen. La princesa Aunak liberada se recluyo en el castillo busco el amparo de su padre y la comprensión de su madre, Manuk la veía sollozante vagando por el castillo en un desasosiego continuo, no podía imaginarse el porque y nadie le decía nada, era pequeña le decían para entender, se le encogía el corazón al verla así, ella que era tan apuesta, tan coqueta y ahora parecía una sombra de ella misma, intentaba consolarla pero le decían lo mismo que era pequeña. Los pretendientes se acumulaban en la puerta y ni eso era capaz de animarla. Volvió una larga temporada de paz y se fue suavizando el dolor y la vergüenza de Aunak y en el castillo volvió a reinar la alegría. Durante ese tiempo la pequeña princesa Manuk recibió menos atenciones de las habituales acaparadas por su hermana, en vez de sentirse apartada se sintió agradecida y así pues puedo disponer de tiempo sin el control férreo de sus padres y salir así sin su vigilancia.<br />
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Samir escuchaba embebido en la historia en un rincón de la plaza, escuchaba y se iba formando las imágenes dibujaba los castillos con su pensamiento maravillado, escuchaba y revivía las historias, escuchaba y recreaba el pasado, no se dio cuenta que la escasa gente que se había congregado iba desapareciendo y el anciano que había contado la historia se afanaba en recoger de una manta que había dejado extendida en el suelo las pocas monedas que la gente le había echado. El chico se acerco hacia donde estaba el anciano, este con pericia doblaba y enrollaba la manta en un atillo que juntaba con los pocos enseres que portaba.<br />
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-Hola Samir.- Le dijo antes de que este llegase,<br />
-Hola.- Contesto el niño avergonzado.<br />
-Pensé que hoy no habías venido tampoco tú.<br />
-Si, yo si, estaba al fondo medio escondido, mi padre dice que es una tontería escuchar tanta historia, que lo que tengo que hacer es trabajar y olvidarme de cuentos de viejos, que los cuentos no me llenaran el estomago cuando tenga hambre. Por eso no medio una moneda así que no la tenía para echarla y pensé que estando lejos desgastaría menos la historia, desde lejos no haría falta tener que pagar nada.<br />
-Aquí nadie paga, Samir, cada uno aporta lo que quiere o puede sin poner restricciones a nadie y si no se puede no se puede, me basta con que las historias no se pierdan en le olvido. Tiene razón tu padre, las historias no te darán de comer, aunque también se equivoca, las historias hacen de uno mejor persona, te permiten ver otras perspectivas de la vida, aunque aun eres pequeño para comprender esas cosas. Deberías hacerle caso e ir a trabajar.- Samir se mordió los labios, había desobedecido a su padre por escucharle y si se enteraba le azotaría y el contador de historias en vez de estar contento por esa muestra de valentía en su honor le reñía, se sintió acalorado y contrariado.<br />
-Pero a mi me gusta escuchar las historias, me gusta saber cosas y mi abuelo ya no me cuenta esta muy mayor y se le olvidan o las mezcla y mi madre tampoco tiene tiempo me dice que ya soy mayor, ni tan siquiera le cuenta a mis hermanos que son mas pequeños.<br />
-No debes desobedecer a tus padres Samir, nuestro tiempo se ha acabado, ya ves que cada vez viene menos gente a disfrutar, cada vez estamos mas solos y terminaremos desapareciendo, la gente ya no quiere escucharnos, ya no quiere saber de antes, solo quiere progresar y olvidar quienes son.- La tristeza disfrazada por muchos años de cuenta cuentos en su voz se disipaba en un hilo que se perdía en lo mas profundo de sus propias historias.<br />
Samir se acerco mas al hombre y le ayudo a bajar del pequeño estrado de madera que había en el centro de la plaza, el hombre ciego agradeció su hombro y apoyado en el descendió los dos escalones, en silencio lo acerco hacia la taberna pero en vez de entrar prosiguió hacia la derecha donde el pequeño mulo permanecía atado a un poste. A Samir se le encogió el corazón y aunque era pequeño se dio cuenta que las pocas monedas que le habían echado no bastaban para pagar una cena y un lugar cerca del fuego donde dormir, quiso decir algo pero tenia la boca tan seca por la desazón que fue imposible. Quería decirle que lo esperase, que el le daría su cena mas tarde, que le abriría la puerta del corral y le permitiría dormir en la cuadra, mejor eso que nada y su padre no se opondría si se enteraba, de todas formas a esas horas estaría ya casi borracho. Pero nada salio de su garganta, ni una sola palabra de todas las que el anciano le había enseñado y lo vio alejándose sobre el mulo en silencio en una dirección que no supo precisar y hacia un tiempo que tampoco supo cual era.<br />
Volvió a su casa silencioso y cabizbajo, demasiado mayor para escuchar historias y demasiado pequeño para entender el mundo. No volvió a ver al anciano ciego que se sabia todas las historias que los hombres habían escuchado y se dedico a trabajar en el campo, habían hecho acequias, habían domesticado el río y ya no contaban historias de lluvias ni de nada, nadie recordaba ya el Reino de las Nubes ni a sus señores y poco a poco estos se fueron retirando hacia el norte. Samir crecía y se iba convirtiendo en un mozo de buen ver pero al contrario que sus amigos todavía no perseguía a las chicas ni tonteaba con ellas, en su tiempo libre se tumbaba bajo un olivo a la sombra con una tinaja para guardar agua fresca y miraba al cielo, no recordaba por que pero dibujaba con el dedo en el castillos, altas torres, barcos, murallas y pasaba así las tardes en la hora de mas calor del día. Algo dentro de el le obligaba a hacerlo pero no lograba recordar el porque. Ya no llovía y las tierras empezaban a estar áridas, el río había bajado el caudal y las acequias tampoco transportaban agua, las cosechas se perdían y ya llevan así tres años, todo el progreso y el bien estar que habían conseguido se iba disipando, lo ahorrado se gastaba, el trabajo faltaba los árboles morían, las plantas habían desaparecido y los animales huían. Samir seguía en su olivo que aun se mantenía con hojas, el habitual verde se había convertido en marrón claro pero aun así se mantenían, al volver a casa vio a su abuelo que dormitaba en una hamaca en el porche, no entendía que decía pero si distinguió un nombre Manuk.<br />
-Que dices abuelo? Pero su abuelo ya dormitaba de nuevo y no dijo nada mas. Esa noche Samir tuvo un sueño intranquilo, se agitaba, se despertaba, escuchaba truenos, fuertes truenos y una gran tromba de agua que caía, la mayor tormenta que el jamás había escuchado se despertó agitado y contento por que llovía, fue corriendo a la puerta de la calle y salio fuera, quería mojarse, quería que la lluvia corriese por todo su cuerpo, pero cuando salio todo estaba en calma en el cielo brillaban las estrellas, no se veía ni una nube, en los campos cantaban los grillos y las gotas de lluvia no chapoteaban en los charcos, la contradicción y la rabia se juntaron en su cara y la decepción fue tanta que cayó arrodillado al suelo llorando, con la luna por testigo cruzada por una sombra, solo había sido un sueño. Volvió a la cama triste.<br />
A la mañana siguiente se levanto temprano como siempre fue al corral a sacar a las cabras pero ya solo quedaba una y no había hierba donde dejarla atada, tomo una decisión, sino hacia algo todos morirían de hambre, esperaría hasta la próxima luna y se embarcaría en un viaje en busca de algún lugar donde creciese la hierba. Lo tenia pensado pero no se lo había dicho a nadie, su abuelo, su cómplice en otros tiempos pasaba el día dormido, su padre estaba ausente también por otros motivos, cuando las cosas les empezaron a ir bien salía todas las noches y bebía hasta desfallecer incluso había veces que tardaba días en volver a casa. Tenían muchas tierras pero las tierras ya no producían nada, su madre bastante tenia ya en preocuparse por sus dos hermanos pequeños, era una carga y la poca comida que quedaba la tenia que reservar para ellos. Se llevo la cabra junto al olivo donde el se tumbaba que era el único sitio donde había algo de humedad y nacía alguna hierba, se tumbo mirando al cielo dibujaba con su dedo formas imposibles sin guión ni diseño mas por costumbre que por certeza y empezó a recordar la historia del Reino de las nubes y mezclarla con el sueño de la noche anterior.<br />
Comenzó a llorar, lloraba por el olvido por lo que habían dejado atrás, por perder sus orígenes y olvidar las historias que tanto habían contado antes, corrió a casa e intento que su abuelo le contase alguna historia pero no lo consiguió, le dijo a su madre que le contase alguna pero ella también las había olvidado todas, volvió desecho a su lugar preferido a mirar hacia arriba y le pareció ver una nubecilla que corría con gracia por el cielo, era tan ligera que casi no se apreciaba, había que ser avezado y haber mirado mucho el azul intenso para descubrir esa diferencia. Se puso de pie con diligencia buscando esa imperfección esa diferencia en el cielo pero esta desapareció y de repente sintió un frescor extraño que se mezclaba con su piel, sintió como si unas manos invisibles tomasen sus manos y de haber besado alguna vez a alguna chica hubiese sentido la delicadeza de un beso en sus labios, una sonrisa fue creciendo en el, sin saber por que se sentía contento.<br />
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Manuk continuaba en el castillo inquieta ya por tantos años de tranquilidad que la tenían aburrida, salió hacia las tierras del sur que hacia ya tanto tiempo que habían abandonado para dirigirse hacia el norte, los hombres de allí ya no nos necesitan le había dicho su padre pero la curiosidad pudo mas que la prudencia y hacia allí se lanzo, llevaba días deslizándose sin impedimentos, sin nadie que la vigilase, ni ningún súbdito de su padre que pudiese controlarla, así que se sintió libre y feliz.<br />
Se acercaba cada vez mas a la ciudad que los hombres habían construido y la intrigó un muchacho de facciones agradable y piel aceitunada que se tumbaba a dibujar el cielo bajo un árbol. Lo espiaba deslizándose sigilosamente, deshaciéndose casi por completo como le había enseñado su hermana, casi invisible y sintió algo por el, notaba su tristeza, notaba el desasosiego y lo había visto llorar desconsoladamente escondida delante de la luna casi llena una noche que había salido al patio. Manuk se preguntaba como la gente podía vivir en un lugar como ese tan seco, sin la alegría del color, con tanto polvo zarandeado por el viento. Fue mas atrevida y cuando lo vio ponerse en pie un día que miraba al cielo descendió y danzo hacia su alrededor sintiendo el calor de su piel, la caricia de sus manos y se entremezclo entre sus labios sintiendo el roce que la sacudió tan fuerte que a punto estuvo de deshacerse y caer al suelo reseco.<br />
En los largos años que había pasado con su padre este insistió en que aprendiese los idiomas de los humanos y le enseño como moverse para que sus movimientos formasen sonidos y con ellos sus palabras y para poder comunicarse, pero ella le parecía una tontería aprenderlos y mas ponerse a conversar con ellos, tan insignificantes. Ahora le penaba no haberlo hecho y no sabia como enterarse que le pasaba a ese chico que estaba triste y acongojado, con una piel calida que le hacia sentir algo que hasta el momento nunca había sentido. Paso una cigüeña solitaria que parecía conocer bien ese lugar y le pregunto que le pasaba a ese chico, la cigüeña le explico a la princesa el porque de su dolor, la impotencia, la sequía y la determinación que había tomado de apartarse de su familia y marcharse a buscar otro lugar. La princesa empezó a empatizar con el, tenia demasiado cerca lo de su hermana y separarse de la familia no estaba bien, aunque debajo de ese sentimiento había otro, el roce con la piel del chico, le abrumaba y cada vez que lo recordaba se agitaba.<br />
Los días siguientes se afano en repasar los idiomas de los hombres con su hermana que accedió agradecida por el requerimiento. Volvió otro día en el que el chico intentaba remover la tierra reseca con una azada, danzo a su alrededor, produciendo un escalofrío en el cuerpo de el, el contacto se hacia cada vez mas cercano, el la sentía, ella lo sentía la vaporosidad de ella se afanaba por recorrer la piel desnuda del chico, Samir asustado quería huir, pero algo le decía que la caricia era reparadora, buena.<br />
La princesa fue concentrando su esencia formando un cuerpo femenino, esponjoso blanco como la nieve de su misma estatura posándose al lado de Samir. La princesa comenzó a hablar despacio con un nerviosismo que nunca antes había experimentado, él extrañado la escuchaba, le dijo quien era y comenzaron a verse habitualmente. Samir le contó su sufrimiento y desazón, la sequía que le obligaría a marcharse y la pena por sus hermanos pequeños. Manuk intentaba alegrarlo y danzaba con el, sintiéndose, sintiendo cosas que nunca hubiese imaginado que se podía sentir, se enamoro de Samir y Samir se fue enamorando a su vez de la princesa.<br />
Manuk un día en el castillo de su padre cuando estaban solos, le pregunto por que ya no viajaban hacia el sur, su padre le contesto que les habían olvidado, que ya no los necesitaban, se valían por ellos mismos y no querían saber nada de su pasado, de las historias que les recordaban quienes eran, le previno de no mezclarse con ellos y de evitar en lo posible su contacto. Manuk volvió a insistir, le dijo apenada lo mal que estaba la tierra, que mandase aunque fuese un poco de lluvia, el rechazo fue total, fue un no rotundo, tan rotundo que se asemejo a un potente trueno. Los hombres que no abrazan su pasado no tienen futuro le dijo. Tardó varios días en volver a ver a Samir, no sabia como decirle que su padre no les ayudaría, había hecho acopio de toda la humedad que pudo y cuando estaba danzando a su alrededor se elevo y contagiada por la felicidad que irradiaba Samir comenzó a dejar caer una suave lluvia, Samir se sintió muy feliz, por primera vez en mucho tiempo, lloraba de alegría, saltaba y cantaba y en sus saltos hacia cosquillas a Manuk, ella contagiada mas de su alegría continuo soltando la fina lluvia, caía tan suave que se podía confundir con una caricia de enamorados, revoloteaba como los labios que rozan el cuello del amado, perdieron la noción del tiempo en ese danza de sinceridad y acercamiento, la tierra recibía el agua que caía y la empapaba con gula no dejando ni tan siquiera que se formasen charcos. Cuando se quisieron dar cuenta Manuk se deshacía sin poder frenarse ya, recordó lo que tantas veces le habían repetido sus padres, todo tiene un limite y nosotros aunque podemos reconstruirnos llegado el momento no podemos invertir la tendencia cuando nuestra masa es pequeña y desaparecemos para siempre.<br />
Samir sintió el miedo creciente en el roce de las gotas de agua y de alguna manera fue consciente de lo que ocurría, corrió al olivo donde guardaba la tinaja la vació con urgencia y corrió donde las ultimas gotas de Manuk caían, se desprendían como lagrimas satisfechas por una buena acción. Samir lloraba también acongojado, su enamorada se evaporaba, su amiga se deshacía y el futuro se desvanecía, pudo conseguir guardar un poco de la lluvia dentro de la vasija que aferro contra su pecho, busco un lugar donde guardarla, de alguna manera la tendría siempre a su lado, se hizo una promesa, nunca se desprendería de ella, seria su amor por siempre.<br />
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En el castillo del rey los ánimos estaban agitados, su pequeña no estaba y nadie sabia que había ocurrido mando emisarios a preguntar, revolvió todo el cielo, pregunto a los pájaros que vuelan libres, hasta que una cigüeña le dijo que días atrás la princesa le había preguntado por lo que decía un joven.<br />
Samir se aferraba en la noche a la tinaja con la esencia de su amada, fabricaba sueños de como seria su futuro, estando juntos nada les podía pasar se adormilaba con esa idea, pero enseguida se despertaba agitado sabiendo que la princesa debería ser libre, por mucho que el la cuidase no podía permanecer para siempre encerrada en una tinaja. Pero se sentía impotente el no sabia como hacer para devolverla a la vida, ni tan siquiera había nubes para preguntar por el rey si es que existía de verdad, así paso la primera noche con una zozobra que lo agitaba por dentro. Antes de amanecer sin saber porque cogió la tinaja y se puso a caminar hacia el norte, si había nubes y si existía un rey debería estar allí.<br />
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El rey salio del castillo colérico, no podía permitir volver a perder otra hija y menos con un humano, traslado sus huestes hacia el sur, la gente de la ciudad estaba alegre volvían las nubes después de tanto tiempo festejaron en el final de la noche cantando y bailando, pero las nubes se fueron acumulando unas encima de otras, formando murallas que se perdían hacia arriba, el color comenzó a cambiar y el blanco fue tornándose gris y después negro, se oculto la luna y la oscuridad fue total, se levantaron vientos ensordecedores insuflados por las propias nubes, imitaron la lengua de los hombres y se escuchaban arengas de batalla, rugidos de rabia, los niños fueron los primeros en llorar y esconderse, las mujeres los persiguieron protegiéndolos, los hombres borrachos de alegría y audacia permanecieron altivos, desafiantes hasta que poco a poco también fueron desapareciendo, los mas ancianos en la oscuridad de sus casas y atenazados por el miedo recordaron las historias que antes se contaban y en esa noche oscura volvieron a contarlas para apaciguar en los mas jóvenes el pavor creciente.<br />
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Samir hacia horas que había salido y estaba alejado ya de la ciudad ajeno a todos los acontecimientos, lloraba cuando descansaba sobre una roca, la cigüeña que lo vio la primera vez paso volando rozando el suelo, se fijo que era el chico con el que había hablado la princesa dio media vuelta revoloteando sobre el, escucho sus lamentos y como Samir se repetía que Manuk no debiera haber hecho llover y menos en esa tierra, en la tierra que la gente olvida su pasado, se repetía que Manuk era mas noble, mas leal y mejor que todos ellos juntos y no era justo que ella pereciese y ellos se salvasen. Voló la cigüeña con el mensaje, con una velocidad inusitada mas incluso que el mejor de los halcones buscando al Rey, sabia que si hacia estallar su cólera nada quedaría del lugar de los humanos y al fin y al cabo ellos solo eran culpables de olvidar. La historia que le contó la cigüeña conmovió al Rey y paralizo de momento cualquier muestra de violencia pues era un Rey justo y quería primero hablar con el joven.<br />
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Lo encontró caminando hacia el norte con la tinaja entre sus manos, se planto delante de el, emergiendo como por arte de magia, magnifico, grande, poderoso, amenazante. Samir le contó lo ocurrido y le dijo que la amaba y que tenia sus restos en la tinaja, que si tenia que morir moriría, pero antes debía entregar a los suyos lo que quedaba de la princesa, es justo que uno descanse con los suyos le dijo. Al momento el Rey sintió un gran afecto por el chico y mas cuando este le mostró que en el interior había agua, estaba su pequeña bien cuidada. El Rey grito con fuerza y las nubes se abrieron, llamo al sol su amigo que descansaba y se avino a adelantar su amanecer, que no hacer por un amigo, ese día la noche se termino una hora antes de la cuenta, dejando el día una hora mas largo como cuando cambian la hora.<br />
El Rey explico a su amigo el sol que es lo que quería hacer, es una tarea complicada le dijo, cuando yo vierta el agua deberás hacer que se evapore antes de que toque el suelo, era temprano las estrellas no habían tenido tiempo de ocultarse y el calor era ya intenso mas incluso que cuando el día esta mediado, tomo la tinaja en sus manos se elevo e hizo que esta estallase en el aire, el barro cocido salio despedido hacia los extremos y el agua comenzó a caer como una lluvia torrencial precipitada, el sol apunto su mirada y según iba cayendo se iba evaporando formando una nubecilla ligera, su padre hizo que lloviese mas y el agua que caía también se evaporaba haciendo crecer mas la nubecilla, hasta que tomo el aspecto que Samir había visto la primera vez en el cielo, Manuk volvía a ser ella, el sol descendió su calor refrescando al momento la mañana, el Rey satisfecho abrazó a su hija que miraba a Samir desde la altura, Samir lloraba de alegría, nunca imagino que Manuk podría volver y ella descendió a tomarlo de la mano. El rey se dio cuenta que el chico era noble y que amaba a su hija y ella le correspondía, las nubes volvieron a la ciudad en la que comenzó a caer una fina lluvia y a regar los campos, el Rey busco una alta montaña donde su pequeña no correría ningún peligro e hizo una casa para que la Princesa y Samir viviesen felices.<br />
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<br /><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-45231703381414702522013-04-19T13:04:00.001+02:002013-04-19T13:05:16.202+02:00298<br />
En uno de estos últimos post que me quedan quería haber hecho un balance, un tocho teórico sobre D/s, siempre he sido reacio a dar ese tipo de información por un medio no matizable, aún así estaba escrito y a punto de salir, pero leyendo un Domingo creo que el de hace tres el semanal del diario vi una frase que me hizo pensar y recapacitar, y lo borre.<br />
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"Que alguien que está necesitado de aprender se juzgue capacitado para enseñar es algo, en verdad, que estremece y desafía el sentido común, una subversión de las categorías humanas que nos confronta ante el horror vacui." <br />
Juan Manuel de Prada<br />
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Así que os los cambio por esta imagen que aunque no sea muy de cuerdas no por eso dejo de admirarlas.<br />
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<br /><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-43992527806106877132013-04-17T18:33:00.000+02:002013-04-17T18:50:14.619+02:00A veces me gusta la publicidad<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
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En uno de esos viajes relámpago en los que te enteras que los aeropuertos existen con todo su caos, hasta el que no te venden, me dí cuenta que viajar no era tan complicado; un pasaporte con la foto de domingo, un visado que aun no me han sabido responder para que es necesario si ya hacienda me tiene fichado y el intercambio de datos entre las distintas agencias es ya un hecho consumado. La cantidad justa de dinero en efectivo, que mala fama nos han puesto los evasores fiscales que ahora lo somos todos en potencia y no sirve ya decir eso de que es para comparar unos Cohibas en cuba. Algo de ropa en una maleta o en su defecto bolso de viaje que no da buena imagen viajar con las manos en los bolsillos, la última vez que lo hice todo el mundo me miraba mal y eso que iba en mi coche solo y a una casa rural en medio del monte. Un neceser con frascos de esos que parecen de jugar a muñecas y el cepillo de dientes que mola verlo dentro del vaso en el cuarto de baño del hotel aunque no tengas tiempo de utilizarlo. Para viajar en avión se puede prescindir del neceser, sus frasquitos te pueden hacer pasar un mal trago, como me ocurrió una vez en el aeropuerto en Samara, explícale a dos metros cuadrados de espalda, con los zapatos en una mano, el cinturón en la otra, los pantalones escurriéndose por las piernas, la camisa fuera de su sitio, las gafas perdidas que mas parecía que andaba de reseca volviendo a casa que de viaje, en un idioma impronunciable que la espuma de afeitar de la Toja es la mejor del mundo mundial y todavía el formato no se había actualizado a las normas de aviación vigentes o por lo menos la mercería de las Juanas que es donde yo la compro. Tarjetas de crédito, con una es suficiente pero me he fijado que en los hoteles ponen mejor cara a los que despliegan una andanada de ellas del mismo tamaño pero de colorines diferentes, y digo yo, si todo el dinero que tengo en casa cabe en una para que llevar mas, claro que pensando me di cuenta que hay gente que tiene mas de una casa y por eso debe ser que tiene mas tarjetas, aunque en mi habitual pensamiento contrario como lo aprendí en la universidad esa de nombre de sudadera, acusar y defender, también podía ser que no tuviesen casa y las utilizasen a modo de ladrillo para esconderlo debajo. A lo que iba que me voy por las ramas y me he de dejar lo importante, en un viaje que hice rapidito, bueno rapidito no, que tardamos 10 horas en llegar yendo ligeros con un poco de viento de cola y sin parar a echar gasolina ni tomar café. Imagino, por que no vi al piloto del avión en todo el viaje diciendo eso de mear rápido y en 10 minutos todos arriba que no esperamos supongo que muy profesional el, así lo haría. Después de llegar y volver a pasar los tramites interminables de un aeropuerto, de encontrar salidas entre pasillos, maletas que se esconden, escaleras mecánicas que no suben, puertas de cristal que no se abren y te da por traspasarlas y te das cuenta por lo menos tu nariz y tu frente de que no, de que hay cristal y además duro. Me puse a indagar y a buscar a la persona que tenia que encontrar, ducho en la materia, jaleado por mi mismo idioma aunque sonaba diferente me dio por coger un taxi entre las risas de una morena de la edad justa para tener una madre de muy buen ver que me decía que a esas horas y delante de la gente es mejor tomar que coger, y en mi ligera suspicacia caí en la cuenta de donde estaba y con el pensamiento ágil después de una larga siesta de 9 horas respondí que a esas horas no tenia estomago para tomar un revuelto de chapa, cristal y caucho, que si fuese látex igual lo intentaba, soné borde lo se pero la jovencita de tetas prietas y pezones marcados estallo en carcajadas rivalidad maternal supongo. Con su desplante, el de la madre digo, mala cara y tirón de la mano de la hija me quede solo y sin expectativas que ya me había hecho ilusiones yo de que había ligado y pasaría una grata noche en agradable compañía. Subieron a un taxi de color rosa, intente parar a dos iguales que iban detrás y pasaron de mi, no se si por que la señora les había hecho alguna advertencia que no vi o aun quedaban en mi cara restos del borde que había sido momentos antes. No me importo mucho por que mirándolo bien no conjuntaban con mi ropa, tirando de tópico iba vestido de blanco con faja roja, uniforme sanferminero, una manta al hombro listada de rayas verdes, rojas, azules, fucsias un arco iris llamativo y un sombrero de paja de ala ancha, anchísima que se me antojo inútil caminar con el y mas intentar meterlo en cualquier vehiculo destinado a las personas, pronto me di cuenta que no es un buen consejo seguir tópicos pues yo era el único de esa guisa en todo el aeropuerto y en vez de pasar desapercibido era el centro de atención, cambie el tópico por refrán, donde fueres haz lo que vieres, me deshice del sombrero que ya empezaba a tener complejo de boletus edulis y de la faja roja, la manta la guarde, quien sabe en este oficio de buscar cosas o personas cuando va a llegar una noche de dormir al sereno. El caso que ante la ausencia de vehículos en los que montar continué con mi cometido, preguntar y encontrar a esa persona, el cometido por lo menos idealizado parecía sencillo, no lo fue tanto cuando al preguntar me dijeron que en ese Pueblo en masculino vivían 1 millón de personas con todos sus ceros y con los aledaños dos, hijole, se me cayó el alma al suelo se desperdigo tanto que creo que ya no he vuelto a tenerla completa. Aun así seguía animado y no podía haber tantos hospitales que era un buen sitio para empezar mis pesquisas. A mi pregunta, su respuesta, la del taxista que me paró digo, con su vehículo de lujoso color negro sucio, hospital, sanatorio, clínica, ambulatorio, medico, central de maternidad tengo barriga pero creo que aun no estoy para dar a luz, urgencias quirúrgicas, especialistas, ahora si que ya no sabia por donde empezar, mi pericia me decía que empezase por el mejor, el mas caro, mi jet lag que buscase una cantina, un antro o en su defecto un bar y me tomase unos tequilas reposados y me fuese a dormir la mona al hotel después. Uno es cuidadoso y exigente y no me conformo con cualquier cosa, pero preguntar a este taxista se me hacia complicado, dentro de un vehículo negro y no rosa y con complejo de paginas amarillas tenia que afinar mucho en la pregunta. Me soltó en medio de una algarabía que de ser Sevilla seria una bulla, me di cuenta que lo del taxi rosa y las paginas amarillas en vez de pensarlo lo había dicho en voz alta y por lo visto con entonación despectiva. Ya pisando el suelo mire donde miraba y silbaba toda la gente, uno es alto y permite ver por encima cuando los demás son bajos así que no tenia cabezas que me impidiesen ver a una morena, guapa, guapa de verdad, sonriente que me miraba enfundada en un buzo de tela fina y ajustada, blanca, con cremallera delantera que se acercaba hacia mi con sinuosos movimientos levantando una ola de cabezas a su paso con sonido incorporado. Bajaba y subía la cremallera mirándome directamente y me pareció que era el paraíso, acababa de llegar y había ligado por segunda vez, este es un país grande pensé y esta ciudad mas grande aun, si la jovencita del aeropuerto era imponente esta lo era mas. Mis ojos se iban directamente al gesto de su mano que bajaba, bajaba y bajaba y con ella mi mirada que no se hacia esperar, aguantaba la tentación de saltar hacia ella cuando me tropecé de golpe con un entarimado que me llegaba a la cintura e impedía mi paso, no era ella la que venia hacia mi, era yo el que había ido hacia ella atraído como un imán, me decepcione un poco a mismo, poco, por que ya su pecho se abría a mi vista y todo lo demás caía en el olvido, los pezones de sus turgentes tetas quedaban tapados por una cinta oscura con unas letras escritas, agudice mi miopía para poder leer lo que ponía, quizás su teléfono, un guiño hacia mi que aun mantenía ese rescoldo en mi entrepierna. Me sacó de dudas un golpe certero de viento y un movimiento ágil de sus hombros. Con una publicidad como esa como dejar de ir a ese sitio, una cosa hizo bien el taxista, me dejo en el lugar adecuado en el momento preciso. No encontré a la persona que buscaba pero si un lugar en el que capear el jet lag y sin la moto que tiene mas merito y un método de publicidad que me encanto a mi y por lo menos a la mitad de la población mundial, fresco, hipnótico, turgente que acelero mi pulso y me predispuso para aligerar mi cartera. El regreso como la ida, durmiendo una siesta mas larga con viento de frente.<br />
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<br /><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-110847789485911982013-04-13T11:48:00.002+02:002013-04-13T11:48:18.710+02:00296. Preparando el equipaje<span style="font-size: large;">Imprescindible, que no se me olvide.</span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbp7eagUv1hTLLoWVQlwLF469FokfXnpOjblsIAWYw3TIBkbSgJI15DWMQgV1sWEEH4oo7HxsvaCGS1U-JULCsnkpAQPmR_-7avuQ9cq03VLwhFp_eAhvpUik1bzbj-3iaqVqmJQ/s1600/Barbie.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgbp7eagUv1hTLLoWVQlwLF469FokfXnpOjblsIAWYw3TIBkbSgJI15DWMQgV1sWEEH4oo7HxsvaCGS1U-JULCsnkpAQPmR_-7avuQ9cq03VLwhFp_eAhvpUik1bzbj-3iaqVqmJQ/s640/Barbie.jpg" width="451" /></a></div>
<br /><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-1302704667049348272013-04-05T19:25:00.000+02:002013-04-06T12:40:27.302+02:00... cambio de día dejándonos atrás abrazados....<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
<span style="font-size: large;">giselle-Besalu Fin</span></div>
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-Cual es la pregunta?<br />
-Sino le importa se la haré mas tarde, ahora necesito calmarme un poco después de contarle todo esto.<br />
-Claro que no me importa-. Sonreí<br />
-Mejor así, los nervios me traicionarían ahora, y ya le digo que es muy importante.- Le tome las manos y sentí el temblor, la agitación que la sacudía con pequeños espasmos, sentí su lucha, la grieta que se había abierto en su interior y que ya sabia que no podría cerrar, para bien o para mal su decisión partiría el mundo en el que vivía hasta ahora.<br />
-Que son las chapitas que me dio Jean Pierre para Usted?<br />
-Esa es la pregunta?<br />
-No, su voz sonó perdida en medio de una sonrisa, no Señor. Pero me he acordado ahora de ellas y supongo que será algo importante.- Sonreí.<br />
-De verdad que quieres saberlo?<br />
-Solo si Usted cree que debo saberlo. Pero he de reconocer que me ha intrigado, parecen chapas para escribir nombres y colgarlas en los collares, en la Maison las gatas las llevaban pero no puede ser algo tan simple conociéndolos a Ustedes.<br />
Volví a sonreír me hacia gracia la forma que tenia de decir las cosas cuando no quería decir nada y a la vez lo decía todo.<br />
-Son SmartTags.<br />
-SmartTags?<br />
-Si, como te lo puedo explicar, la tecnología avanza y aunque pueda parecer que somos bastante clásicos, también nos adaptamos a los nuevos tiempos. Los hay de varios colores, no es que sean importantes por que todos sirven para lo mismo, lo de los colores es para identificar determinados momentos, o como suelen decir perfiles. También sirven para escribir el nombre sobre ellos por supuesto pero lo fundamental es que dentro se pueden grabar cosas y después basta con acercar un Xperia y en la pantalla aparecen todos los datos o los modos. Por ejemplo supón que vamos a una fiesta y uno se acera a ti sin hablar contigo, ni dirigirte la palabra, guardando el protocolo por que llevas collar, acerca el tfn. a la chapa y se vuelca en el la información y en la pantalla aparece que eres una perra a medio entrenar, que se pueden usar todos tus agujeros, que te has especializado en hacer mamadas, que te puedes tragar la polla hasta los huevos y que no tienes Amo entonces esa persona hablara contigo y vera si le interesas. O por el contrario aparecerá que tienes Amo y entonces no te molestara, sin quebrar tu orden de silencio si la hubiese, o tal vez que tu Amo te puede ceder si se le hace una buena oferta y de esa manera te envía directamente a su teléfono. Esa es una de las utilidades que se le puede dar, hay mas claro, la imaginación es el límite. Otra por ejemplo es utilizar los colores, yo dejo grabados varios SmartTags y te los dejo en casa, salgo de viaje y te digo a las 8 utiliza el gris, vas con tu móvil lo acercas y en la pantalla te sale la ropa que debes vestir y lo que debes hacer hasta la próxima hora y el siguiente color donde te dirá como debes continuar, si me puedes llamar, o donde quedamos. Ya se que lo podría dejar por escrito en la mañana o ir enviando mensajes, pero la incertidumbre de no saber que será lo próximo tiene su encanto, es una forma de utilizar la tecnología y actualizar un poco los collares, algo que hemos empezado a utilizar en algunos círculos. Cuando estuve con Jean Pierre comentamos las posibilidades que se abrían y nos gustó así que empezamos a experimentar con ellos, lo que mas nos gustó es que son versátiles y se puede pregrabar lo que se quiera y las veces que se quieran.- Me escuchaba atentamente en silencio como si tuviese yo una verdad absoluta y ella no quisiera romper ese momento mágico de admiración.<br />
-Los va a utilizar?<br />
-Tengo que ver primero como me los ha enviado, supongo que estarán personalizados como una muestra de su avance o uso. Ya veré cuando tenga tiempo y claro hace falta un cuello. El tuyo?<br />
Se sonrojo en una precipitada huida de su mirada, la pared de la izquierda de repente empezó a tener algo muy interesante que contar, la vi dibujar en ella sus dudas, frenar sus certezas y disipar despacio su turbación. Cambie la pregunta borrando de la pared cualquier resto de sus pensamientos.<br />
-Que te parecen?<br />
-No se, me excita pensar en ellos y a la vez me da una vergüenza atroz que cualquiera pueda saber como eres, que te gusta, que sabes hacer, que deseas, en fin desnudarte del todo y me refiero a desnudar mi esencia, no mi cuerpo, ya sabe que eso no me importa.<br />
-No crees que tu Amo debe tener potestad sobre ti, y decidir el que es lo que quieren que sepan de ti? No crees que tu dedicación, tu devoción sea su orgullo?<br />
-Por supuesto, que se que es así y así debe ser, pero no por eso me avergüenzo menos, se que solo me entregaría a alguien con el que me sintiese segura y tuviese la certeza de que todo lo que me haga hacer lo hace por mi bien, aunque sea caminar descalza sobre las ascuas de mi propio infierno.- Volvió en ella la turbación que otorga la deferencia.-Es como si estuviese encima de una peana y alguien a mis pies estuviese cantando mis alabanzas y mis defectos, como antiguamente hacían con los esclavos en el cadalso o mas recientemente las prostitutas que se exhiben para su elección, lo aceptaría por supuesto pero no por eso dejaría de pasar vergüenza.<br />
Cenamos en animosa conversación cerca de las grandes tinas de vino; dimos cuenta de la parrillada de verduras y espárragos trigueros, de la branca de embutidos catalanes y pan tostado con tomate rayado, y una merluza al horno exquisita, se nos acabo el vino sin postre, saboreando la fruta roja madura aun sin recolectar envuelta en aromas herbales, con evolución de níspero y albaricoque entre la verdura de la huerta y un final dulce de regaliz, su color sangrante, rojo brillante intenso con bordes púrpura, un vino joven intenso y complejo como nuestra conversación.<br />
Paseamos cogidos del brazo de nuevo por las calles esquivas, silenciosas, matizadas de piedra, de roca cortada, que se replegaban ante el frío ascendente iluminados por una luna creciente casi llena que jugaba a esconderse entre los nubarrones que durante todo el día nos habían acompañado amenazando nieve. Encontramos rincones en los que guarecernos de miradas ausentes y desnudar su cuerpo al amparo de los porches que al día siguiente se convertirían en frutería. Su cara se restregaba contra la pared en el rincón mientras me ofrecía su culo, para mi deleite, la respiración cogía volumen espesándose mientras el alcohol se disipaba en los labios ardientes que rozaba la piel fría, aguanto el envite de mis manos sobre los pantys apoyando las dos manos contra la pared rugosa lacerando sus palmas, a sabiendas que mi brusca caricia no le llegaría. Tan solo la excitación de la postura, de la situación en la que se encontraba de cacheo forzado podría de alguna manera aumentar su celo y empezar a provocar en ella excitación. La luz de la hornacina iluminaba débilmente nuestros cuerpos sin los pensamientos que nos sobrevolaban a su libre albedrío. Saltó la noche sobre nosotros y cambio de día dejándonos atrás abrazados en un rincón al que no pertenecíamos, madurando el regusto de los besos, aterciopelando las caricias y dejando escurrir por su coño la orina que empapaba las compresas, las bragas y comenzaba a rezumar su humedad por el nylon, mantenía sus ganas apretando los músculos de la vagina por temor a desbordarse por completo y dejar sobre las piedras del suelo su marca, como una perra marcando su terreno. Aligeramos el paso en los pocos metros que nos separaban del hotel, el líquido caliente se enfriaría pronto y no era el momento para demorar el paseo y acrecentar el desasosiego que el frío líquido podría causarle. La habitación permanecía excesivamente calida, cosa que agradecimos, el frío nos perseguía y nos costo deshacernos de el tras sacudir las prendas de abrigo, me senté en la salita a contemplar como se desnudaba. Iban cayendo las prendas entre miradas esquivas, retrasaba el momento a conciencia, sabia de su pudor y mostrar sus prendas meadas no debía ser agradable. Se quedo al fin con los pantys la vista parecía cómica, tenia un bulto en su entrepierna que intentaba tapar distraídamente.<br />
-No continuas?<br />
-Esta muy mojado Señor.<br />
-Y?<br />
-Nada, que no es buen sitio para dejarlo caer al suelo.<br />
-De que esta mojado?<br />
-Como dice?<br />
-Que como lo has mojado?-Su pudor le impedía decirlo, contrariedades capaz de hacer muchísimas cosas y se bloqueaba con otras mucho mas sencillas. Miraba al suelo esquivándome, me pareció sentir que se alejaba, que entre los dos crecía un prado verde con infinidad de florecillas amarillas.<br />
-De pis, Señor.<br />
-Ves como no era tan difícil.<br />
-Solo de pis?- El rubor, la vergüenza se agolpo en su cara.<br />
-No Señor.<br />
-De que mas?<br />
-De mi celo, Señor, de celo de una puta perra sumisa. Sonreí por que supe que de nuevo estaba muy excitada.<br />
Fui al baño tirando de la mano de ella, deje que la bañera se fuese llenando, mientras contemplaba como se sacaba las compresas empapadas que tiraba a la papelera, se bajaba los pantys y las bragas todo a la vez enrollándolos sobre si mismos y los tiraba también a la papelera, la ayude a entrar en la bañera sin soltarla de la mano, tenia los ojos cerrados. Fue descendiendo hasta que se sentó dentro, le acaricie el pelo, se recostó hacia mi lado.<br />
-Frótate, hasta que te corras.<br />
-Merci.<br />
Se diluyó con el agua amarrada a mi mano. La sequé cuando acabo y subimos a la habitación, durmió a mis pies relajada. El día siguiente seria duro nos esperaba el Forum Gastronómico Girona 2013 antes de volver cada uno a nuestra casa. Al despedirnos me hizo su pregunta y la respuesta fue si, pero esa ya es otra historia.<br />
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<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-89526260857387371692013-04-04T12:54:00.001+02:002013-04-04T12:54:59.460+02:00...solo me tiene por que la tengo....<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDlKaPWgYjL3MbSkxnrqWgdgpQAmqmHcTV2VsWOV5y9QrqmUc0V6ppDXbS4aEYiCHCZEvP1YZUrQBBSIQaw-NMCve3HPPpBgy4DulYnf8fEKBqHwShyphenhyphenofZlxxLrEzktoFMacwzug/s1600/tumblr_mabcp2Rwu41qbszyeo1_1280.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="267" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjDlKaPWgYjL3MbSkxnrqWgdgpQAmqmHcTV2VsWOV5y9QrqmUc0V6ppDXbS4aEYiCHCZEvP1YZUrQBBSIQaw-NMCve3HPPpBgy4DulYnf8fEKBqHwShyphenhyphenofZlxxLrEzktoFMacwzug/s400/tumblr_mabcp2Rwu41qbszyeo1_1280.jpg" width="400" /></a></div>
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Me descubro en su mirada angelical, torpe, con una mano que tiembla ante la perfección de su inmaculada piel, me reta en silencio a que lacere su orgullo y lucho ante la incomodidad de mi humanidad que a veces rescata de mi alma en ese momento en que su humildad me desarma y me entrega su cuerpo sin importar la factura que debe pagar. Sabe entonces que es mía, que me enerva su predisposición haciéndome también suyo, mas allá de su indulgencia a sabiendas de que carece de propiedad y solo me tiene por que la tengo en el equilibrio justo del parpado que se cierra.<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-70115730352162595062013-04-02T14:30:00.000+02:002013-04-05T19:35:31.404+02:00...con una ultima mirada en la que me entregaba todo su ser...<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
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<span style="font-size: large;">giselle-Besalu 5</span></div>
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipXSyA52TQShd-_-vSDUqX45R0-JEORb8vZMnf-h20IJ17JoMxhj8LmVP7hqFw5afL06SW8A85zLjdT1Dx3f-7CzPEP8bD10qOGoCd6NJgB0BaB1s72aYhXAoIV3eXKgjuJSZK5Q/s1600/IMG_4526.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEipXSyA52TQShd-_-vSDUqX45R0-JEORb8vZMnf-h20IJ17JoMxhj8LmVP7hqFw5afL06SW8A85zLjdT1Dx3f-7CzPEP8bD10qOGoCd6NJgB0BaB1s72aYhXAoIV3eXKgjuJSZK5Q/s400/IMG_4526.png" width="397" /></a></div>
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Jugué con ella hasta que presentí que su momento álgido llegaba, los temblores eran el preámbulo de su ocaso y fui retirando mi mano de la entrepierna, sentía como el clítoris buscaba mi mano, buscaba algo duro con el que seguir rozando esa fracción de segundo que necesitaba para provocar el estallido y hacer de ella una mujer completa. La contemple desde atrás orgulloso de su grupa, de sus nalgas cimbreantes que recogían la escasa luz de la lámpara, retozaba sobre ella misma ronroneando como una gata. Volví a ella tras su contemplación, mi mano recorría sus nalgas, subía por la espalda rozando levemente y provocando que su piel se erizara, llego al cuello apretándolo con decisión, lo gire hacia mí sin que por su parte pudiese evitarlo. La bese en los labios aumentando el desasosiego que aun no había cedido en su entrepierna. Sentí como mi mano se apoderaba de todo el peso de su cuerpo, su cuello era el nexo de unión conmigo y lo demás cedía como un vahído que deja relajado todos los músculos, volví a besarla insuflando aliento en su huida a otra dimensión. Sus ojos se fueron cerrando frente a mi con una ultima mirada en la que me entregaba todo su ser, la potestad de decidir sobre ella, sobre su vida, sobre su muerte, sentí en ese momento que se hacia mas pesada, que un velo oscuro la cubría y su cuerpo se derrumbaba arrastrando su celo. La folle entonces desde atrás, derrumbada sobre el sofá, con determinación, con una fuerza inusitada, envites acompasados, con un ritmo que me recordó un masaje cardiaco y volví a besarla con delicadeza insuflando de nuevo aire a sus pulmones esperando su regreso, su vuelta a la vida, al mundo, renacida en su propio orgasmo. La sentí gemir en su agitada respiración, bocanadas que absorbían aire y exhalaban placer, una reentre victoriosa que difuminaba de complacencia en su rostro un gesto risueño recompuesto tras la exageración alborotada que habían quedado sus facciones. Permanecimos juntos abrazados masajeaba su pecho mientras mi polla se iba diluyendo en su interior, escurriendo así mi soplo de vida sobre ella. Se le escapo un merci, rasgado, apenas sonoro con una musicalidad que parecía estar escrito, esculpido en mármol blanco con betas rosas. Nos duchamos juntos, riendo, frotando, restregando un cuerpo contra otro con caricia jabonosa y la fricción diluida por la espuma. Continuamos sobre la cama, como si el tiempo en ese momento hubiese dado una tregua y el reloj parado esquivase nuestras miradas. Volvió a vestirse de rosa y gris en ese cambio tan sofisticado, me gustaba verla así, tan tierna, las medias grises de punto con cintas rosas, la falda rosa corta demasiado corta con tul gris, el jersey ajustado gis y la chaqueta de punto a rombos rosa y gris. Los zapatos grises con el detalle en rosa de plataforma y alto tacón que hacia que andase con una delicadeza que era inusitada en ella, supe que lo hacia por mi que todo ese esfuerzo por su parte solo era para satisfacerme a mi. Una vez vestida la admire, se giraba, reía, se mostraba de frente de espalda, levantaba el tul y me mostraba el culo desnudo, pintoresco, coloreado, envalentonado entre el gris de la tela pero justo antes de salir,
-Quítate las medias- Al principio el gesto de desconcierto brilló un instante pero enseguida lo borro y se avino a quitarse los zapatos, permaneció parada un momento, levanto la cara queriendo decir algo pero lo pensó mejor y permaneció callada esperando. Quito las medias poniendo sentido, una ceremonia que iba descubriendo su piel. Me levante y rebusque en su maleta. Le acerque unas bragas demasiado feas para su atuendo, me miró inquiriendo con su mirada una respuesta que sabia que no llegaría, unos pantys y dos compresas.
-No quiere que vaya desnuda debajo?
-Ya ves que hace frío y hará muchísimo mas, no me cabe duda, no quiero que te enfríes y con esa ropa seguro que cocerás un frío.- Sonreí ante su enfurruñada mirada de contrariedad. Se puso las bragas, las ajusto, coloco la compresa se sentó para colocar los pantys, fue deslizándolos por sus piernas sin ninguna muestra de glamour, le crecía la rabieta dentro.- Las medias también.- le dije
-Las medias?
-Si, las medias encima de los pantys, te harán unas piernas mas bonitas, mas torneadas.- Sonrió.
Envuelta en un abrigo de cachemir de color tostado claro, un gorro de punto de lana coqueto y unos guantes de lana prensada grises salimos a la calle. El frío se había hecho mayor, envolvía la noche con ráfagas que difuminaban la luz de las farolas que amarilleaban ya sobre las fachadas de las casas. Queríamos tomar el pulso al pueblo antes de cenar conocer su ambiente y pasear por las calles desiertas cubiertas por la penumbra, no eran aun las 8 y ya el termómetro marcaba 2 bajo cero. La plaza permanecía desierta, en los bares recogían terrazas y se afanaban en preparar viandas para unos clientes que no llegaban, bebimos vino mirándonos, acariciando nuestras manos, con la única compañía de la camarera que charlaba a veces con el cocinero que removía unas patas en la sartén antes de ser bravas. Paseamos por las calles, desiertas, ajenas a cualquier atisbo de humanidad. Claqueaban sus tacones sobre la piedra mientras bordeábamos la siguiente iglesia, el frío se hacia insoportable, buscaba cualquier resquicio entre la ropa para colarse dentro. Entramos en el siguiente bar, seguíamos estando solos cuando al entrar nos cruzamos con el único cliente que había dentro y salía, me decepciono un poco la escasez de transeúntes, de clientes, de gente, volvimos a beber vino antes de volver a la calle y nos dirigirnos al restaurante que habíamos ojeado antes. El Can Quei quedaba junto a la iglesia en una plazoleta que evocaba otros tiempos, a su puerta desplazados hacia un rincón una pareja se bebían los besos con avidez como si fuesen los últimos de la noche con sabor a tabaco a punto de caducar y en ese gesto no cupiese el desperdicio, la rubia demasiado ligera de ropa marcaba los pezones sobre el plateado vestido de tirantes, el chico con camiseta de manga corta acaparaba el poco calor que ambos desprendían. En su interior el bullicio jaleaba al Barca que jugaba su partido, en comparación con los otros bares este permanecía lleno, la gente bebía, charlaba y cenaba y se acomodaba alejados del frío. Nos gustó el Oriol dels Aspres negre del 2012 y nos animo con nuestra conversación ajenos a todo el mundo centrados en ambos.
-Me gustaría comentarle algo, más que comentarle, es una cuestión que llevo tiempo dándole vueltas y ese es el motivo de mi viaje, ya sabe como soy y cual es mi manera de pensar y sentir las relaciones personales. Sabe lo que me gusta y sabe que me cuesta mucho centrarme solo en una persona. Soy una contradicción andante, me gusta que me sometan, me gusta dejarme hacer, pero a la vez me da miedo y entonces huyo, ese es el motivo por el que no tenga Amo, no me gusta decepcionar y prefiero decepcionarme a mi misma antes de hacerlo a alguien al que valoro y respeto. Le he dicho que Lola me llevó a la Maisón de los gatos, y allí experimente algo que llevo dentro desde hace mucho, casi podría decir que desde que lo conozco, pero no he querido reconocerlo por esas huidas mías. Ese sentimiento ha ido creciendo en mi de una manera desordenada por eso necesito a alguien que me guíe, sabe que Lola esta cerca y ella siempre ha querido tenerme, siempre ha querido que sea suya y no pierde ocasión de recordármelo, también sabe que estoy con ella, y que ella hace de mi lo que quiere y no puedo negarme, su cercanía, su insistente opresión, su forma de ser acaparadora, su constante coacción y la labia que tiene con su voz melosa, su forma de decir las cosas que parece que le debes ese tiempo, ese respeto, hace que me deje hacer sin poner impedimentos. Desde que estuvimos con Jean Pierre y Anne Marie todo eso se ha acelerado, la forma que ellos tratan a sus mascotas, la dedicación que les profesan, la forma de usarlos y la complicidad desencadeno en mi esos sentimientos, mas bien los acelero, que ahora me queman por dentro. Estoy cansada de luchar conmigo misma, antes pensaba que luchando contra mi misma siempre ganaría yo, pero solo es una quimera, es un desgaste continuo y al final no me lleva a ningún sitio. Por eso quiero dejar que otro piense por mi, necesito ese descanso, que otra persona se ocupe de todas mis necesidades, que me diga como vestir, que me diga como actuar, que me enseñe como actuar, que me diga que debo comer, estoy dispuesta a ceder todo el control, se que quiero hacerlo, se que necesito hacerlo. Pero ahí vuelven mis temores, si seré capaz de hacerlo, si seré merecedora de que otra persona se encargue de mí. Lola se ha dado cuenta de mi cambio y su presión va increscendo, se esta aprovechando de mi debilidad y yo me dejo hacer, la admiro, admiro su seguridad, su forma de ser y la autoridad que emana. Debo tomar una decisión para que no siga perjudicando mi estado mental esta situación, a Usted lo respeto mucho y antes de tomarla quería hablarlo con Usted, se que Lola no le cae muy bien aunque Usted a ella si. Se nota la tensión y por eso antes de decidir nada quería hablarlo y preguntarle una cosa. Puedo hacerle una pregunta? es muy importante para mi y para mi futuro.
<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-39200286993452323062013-04-02T13:07:00.002+02:002013-04-02T13:07:15.680+02:00El Dress code no se negocia<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwm0rLogZORASHGOwWIHrcxn0AQwl29dqfZ6lbmRtoeorC4ld-_7TVhYIoXqGexFIJBRMPxCi0Fo_M-vimv0qUzoFDByB0FjFmGNIQ5dtPHDm7tpvRz-MrUg8tmy_XtHq6sgycvw/s1600/IMG_3324.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiwm0rLogZORASHGOwWIHrcxn0AQwl29dqfZ6lbmRtoeorC4ld-_7TVhYIoXqGexFIJBRMPxCi0Fo_M-vimv0qUzoFDByB0FjFmGNIQ5dtPHDm7tpvRz-MrUg8tmy_XtHq6sgycvw/s640/IMG_3324.jpg" width="356" /></a></div>
<br /><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-70345661676836159642013-03-23T11:48:00.000+01:002013-03-23T11:53:56.029+01:00Se me olvidó que te olvidé <iframe width="640" height="360" src="http://www.youtube.com/embed/bs73eGP0BEM?rel=0" frameborder="0" allowfullscreen></iframe><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-65961943766998021962013-03-19T13:07:00.001+01:002013-03-19T13:07:56.334+01:00Media imagen o quinientas palabrasSe me olvido abrir el objetivo el único día que realmente merecía la pena hacer una foto. La luz perfecta del mediodía se filtraba a través de un polvo en suspensión que el viento zarandeaba como si fuese brillantina dorada lanzada al aire por una mano inocente avanzando una risa contagiosa, casi infantil, que los pequeños labios ajustaban al sonido del momento. Su ondulante y rojizo cabello navegaba en medio de la plaza del pueblo invitando a seguir una direccionalidad que desembocaba en un callejón sin salida donde una orquestina sobre el entarimado desgastaba el ritmo ternario en un tempo moderato de un bolero que era arrastrado por dobles parejas de pies buscando su alternativa. Lucian apagados los farolillos de colores en armonía con los banderines en constante movimiento y empujados por la luz del sol entre la desconchada fachada de las dos casas, pergeñando un emparrado que apaciguaba en los bailarines el sofoco de una gaseosa agitada. Su sonrisa competía con la ojival portada de la iglesia que enmarcada en piedra entre sus volutas trasgredía la creencia de Demonios enfadados. La banda cruzaba la blonda de la camisa en el pecho primoroso, acariciando su cadera en doble lazada sobre la falda con la misma gracia que le otorga a un ruiseñor el canto escondido del bosque. Tal imagen, tan sutil, me encandilo en apresurada carrera al compás de los petardos que por doquier estallaban avivando la pasión que momentos antes languidecía socorrida con el chapoteo del agua que saltaba sin red de lo alto de la fuente al confortable y refrescante pilón. La carnalidad de sus labios embebía mi discreta mirada afanada por reconocer a la autoridad oronda que se aproximaba por el lado opuesto flanqueada por una sotana de Domingo, marcial, segura, fusionando la tierra árida con el cielo azul brillante sin nubes, lo mundano con lo espiritual, lo tangible con lo efímero. En mi paladar permanecía el acre sabor del vino rancio disfrazado a penas por el rebozado del calamar de un día de fiesta, de buena gana lo hubiese cambiado por la ambrosía que con certeza sabia que ella destilaba en su mohín gracioso escondido tras la naricilla respingona acabada casi antes de que empezase. El porche del ayuntamiento se disfrazaba de gala y por un día robaba el protagonismo de la propia gente que deambulaba hacia el casino, enfrente, contrarrestando así en diferido una jerarquía marcada que enfatizaba su sonrisa con brillo recién sacado. Las mantillas escalonaban en las peinetas envolviendo como para regalo los bucles castaños recién restaurados en prolífica sesión de perpetua peluquería. Ajenos a mi intención de fotografiar con palabras el instante preciso de su desmadejada presencia, cada cual actuaba según su guión improvisando a veces un guiño que distorsionaba el objeto final de mi presencia obligándome así a reescribir el inicio una y otra vez fijándome únicamente en el acto central del cuadro, salivando con ella, descifrando su mirada que me envolvía con la tibieza del aroma a heno recién segado.<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-64176624184222117002013-03-18T06:30:00.000+01:002013-05-17T11:45:05.582+02:00Eres como la lluvia refrescante que llega en un tórrido día de verano sin nubes,<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
<span style="font-size: large;">Giselle-Besalu 4</span></div>
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhry7CB76KmtCZ_QvotvdUhdBePooeGCczPuPiBlbdQRfnEJ0gqQP1jkKzeqeRx0OtfW990qohhyphenhyphentNOTdnAl0KBwPGmSUTLVsUvs9ncbluMbsVvfRAyJA14902O2ZNPpRTNsje3yQ/s1600/IMG_4321.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhry7CB76KmtCZ_QvotvdUhdBePooeGCczPuPiBlbdQRfnEJ0gqQP1jkKzeqeRx0OtfW990qohhyphenhyphentNOTdnAl0KBwPGmSUTLVsUvs9ncbluMbsVvfRAyJA14902O2ZNPpRTNsje3yQ/s400/IMG_4321.jpg" width="267" /></a></div>
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La caja negra tenia un delicado relieve, me tome mi tiempo admirándolo, un trisquel brillaba sobre un fondo mate, lo repase con la yema de los dedos queriendo adivinar que había en su interior, sentía la excitación creciente en Giselle, tan a mano. Levanté la tapa de la caja, encajaba a la perfección y al abrirla sonó como si en ella hubiesen puesto toda la dedicación de una banda sonora, estaba divida en dos, en una de las partes unos aros gruesos de metal brillante eran traspasados por unos ejes que en su parte interior terminaban en T y en la exterior en un pequeño cristal talla brillante de color azul, supe que eran unas pinzas magnéticas, había oído hablar de ellas pero era la primera vez que tenia unas en mi poder. Las sopese, me gusto sentirlas en la mano, su textura suave y pesada su intención callada y lo que podían llegar a hacer. En el otro compartimento había unas chapas redondas del tamaño de una antigua moneda de 50 Pts, en una parte tenían un agujero como si fuesen chapas para escribir un nombre y después poder colgarlas. Eran cuatro, de cuatro colores diferentes, rojo, negro, blanco y morado, sonreí también sabia que eran.<br />
-Y esto? Pregunte haciéndolas sonar agitándolas en la mano cerca de su cara. Vi la agitación en sus gestos, parecía que quería contener las palabras antes de decirlo, respirando hondo y manteniendo su pecho henchido.<br />
-Me las dieron Jean Pierre y Anne Marie para usted, me dijeron que ya sabía que eran y para que servían. Los conoce?<br />
-Vaya, Jean Pierre y Anne Marie. Si que los conozco. Has estado en la mansión de los gatos?<br />
-Si Señor, fui con Lola hace unas semanas.<br />
-Que te Pareció?<br />
-Ya sabe como soy, y estar allí pues bueno, para pasar unos días si, pero para estar de continuo, no es lo mío.<br />
-Y Lola? Que decía?<br />
-Ella estaba encantada, le gusta que le rocen, que le hagan mimos y se le suban encima, todo lo que sea contacto y caricias va con ella. De hecho me dijo que siempre que tiene tiempo se va unos días.<br />
-Lo se, sí.<br />
-Por que no te gustó?<br />
-Los gatos no tienen dueño, y aunque ya sabe que yo soy como soy, y de vez en cuando tengo la necesidad de huir, cuando estoy me gusta pertenecer. Y los gatos tienen casa, no dueño.<br />
-Eso es verdad, pero los gatos aunque no guarden fidelidad o rehúyen de su dueño, se les puede corregir, enseñarles quien manda y dentro de su forma de ser se consigue en ellos una obediencia medida, esquiva, pero obediencia y respeto.<br />
-No se yo, aunque tampoco tengo por que saber. Como se hace eso?<br />
-Todo animal se puede adiestrar solo hay que quebrar su voluntad. Para doblegar a una gata salvaje o medio salvaje, es necesario una jaula y paciencia.- Giselle permanecía en la misma posición, las rodillas sobre el asiento del sofá, los brazos apoyados en el respaldo y la cabeza erguida, la cara frente a la pared, a pesar de mis preguntas continuaba en esa postura, tan solo movía los ojos y los labios.- La encierras en la jaula, la dejas sin comida ni bebida un par de días, bufara cuando te acercas su carácter esquivo y a veces agresivo medirá las distancias y hará amago de atacar, pero no pasan de ahí, al tercer día un poco de agua y pan duro, y los bufidos se van calmando y empiezan a mostrarse cariñosos anteponiendo así su instinto de supervivencia a su carácter, hay que tener cuidado por que aun lanzan zarpazos a la menor oportunidad, el día siguiente igual y ya notas que le va cambiando el carácter, al quinto día ya le das comida y un poco de leche, y entonces ya si que buscan acercarse y frotan su lomo contra tu pierna, has marcado ya la jerarquía, sobre todo cuando al sexto día vuelves al pan duro y el agua y entonces ya si que eres capaz de hacer de ellos lo que quieras. El séptimo la sacas de la jaula y come ya de tu mano, y aunque mantenga cierto grado de independencia sabe que tú eres el que manda y el que decide que hace y que come.<br />
-Por eso me decía Anne Marie que debía quedarme una semana en la Mansión.<br />
-Te gustaría ser una gata mimosa?<br />
-No Señor, prefiero ser una perra, aunque a veces sea callejera.<br />
- Por eso si, por eso te invito Anne Marie a pasar una temporada en la Mansión. Seguramente le gustaste o quizás Lola era la que quería que te amaestrasen para tenerte en su casa. Quedo callada valorando mis palabras, evaluando el viaje, lo que había visto y hecho. Y Lola, siempre presente, siempre intentado huir de ella y siempre aparecía en su vida. Cambie el tema antes de que volviese a uno de sus silencios, a uno de sus letargos. Acaricie el culo que seguía en pompa, colé la mano entre sus muslos ascendiendo hacia su coño, sentía sus pálpitos, sentía como el corazón bombeaba hacia el coño toda la sangre de su cuerpo y este la recibía hinchiéndose, abriendo sus labios lo acaricié despacio rozando apenas la piel, se estremeció y toda la piel quedo salpicada de bultitos, el vello erizado y la pasión desbordándose por todos sus poros. Palpe las tetas que colgaban, balanceándose con mis sacudidas, me gustaba tenerlas así, me gustan las tetas que cuelgan, pellizque los pezones obligándolos a crecer, los frotaba entre mis dedos amasándolos con delicadeza, los pellizcaba con fuerza, los frotaba y ellos respondían creciendo. Bese la espalda, su nuca, me acerque a su oreja y le susurre.- Eres como la lluvia refrescante que llega en un tórrido día de verano sin nubes, eres el despertar de un largo invierno, eres la llama que prende la oscuridad. Y coloque la pinza en el pezón derecho, estrujando la teta entera una vez colocado, hice lo mismo en el izquierdo, mientras besaba su espalda. Escuché sus gemidos, su rebelión controlada, su celo suplicante, la recesión en sus instintos y apareció la fiera que necesitaba ser domada.<br />
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<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-84466224921747846562013-03-16T13:30:00.000+01:002013-03-16T13:30:03.004+01:00 ...tembló parte de mi alma como una fuerte sacudida....<br />
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“El suicidio más acostumbrado en nuestro tiempo consiste en pegarse un balazo en el alma”</div>
<div style="text-align: center;">
Nicolás Gómez Dávila</div>
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgOaFkZgnRTYrDGlD-sLO2wnEqXnzA8OwhecCTHpm40xdJ6kDwZXL1iSRioK7ZbrSeucgfi9RPnZFKtQjd_CoUbUi6tyamFTYbJPB1PVMv4kFvdTtuxSX4icifyOZsfSlB5F-TVxg/s1600/IMG_4221.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgOaFkZgnRTYrDGlD-sLO2wnEqXnzA8OwhecCTHpm40xdJ6kDwZXL1iSRioK7ZbrSeucgfi9RPnZFKtQjd_CoUbUi6tyamFTYbJPB1PVMv4kFvdTtuxSX4icifyOZsfSlB5F-TVxg/s400/IMG_4221.jpg" width="296" /></a></div>
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Como cada año el esmoquin colgaba en la percha perfectamente ajustado, la tersura de la tela parecía estar concebida para acomodarse como una segunda piel, el negro opaco, tan oscuro, era capaz de apoderarse de la luz de su entorno proyectando así la imagen del que lo portaba con una luminosidad tal que era imposible no mirarle. La primera vez que lo vi me encandilo, no por que a su lado luciese una mujer apetitosa de espabilada mirada y movimientos precisos y seguros, sino por que el concepto de dejadez quedaba aplazado estando cerca de el. El tiempo parecía adoptar otro ritmo los segundos revoloteaban con la sinuosidad de unas curvas turgentes, se ralentizaban al ritmo de la carnosidad de un vino al caer sobre la copa, los minutos se zarandeaban con rapidez como el descenso vertiginoso de una montaña rusa, se asemejaban al ritmo de los latidos de un corazón enamorado, la dualidad que marcaba era capaz de acelerar o refrenar el propio tiempo. Los sentimientos quedaban por un momento hipnotizados la envolvente admiración que sentía por ella corría por mis venas antes de explotar en los poros de mi piel y salir al exterior como un pregonero que recorre el país anunciando una buena nueva. Supe que tenia que ser mío, lo supe por que era la manera de acercarme a ella, tenia la necesidad de ver sus manos descolgando el esmoquin del maniquí que sobre el pedestal del escaparate reclamaba las miradas de los transeúntes que esquivaban el frío viento del norte. Vi la delicadeza con que trataba la tela, el primor que ponía en sus actos, el semblante agradable que transmitía una sumisión escondida y el gesto de oler, de alzar la prenda mirarla a contraluz y acercarla a la cara, a la nariz y frotarla con suavidad en su mejilla empapándose del tacto de la esponjosa tela. Conjugaba su piel blanca sin mácula con el negro oscuro y tembló parte de mi alma como una fuerte sacudida que te despierta de un largo sueño marcando el camino que debía recorrer. De alguna manera supe que ya era mía, que había sido mía antes de conocerla y que seguiría siendo mía después de desaparecer.<br />
Estaba dispuesto frente a la cama esperando que lo portase como cada año en una noche tan especial como esa, yo y ella, el único fin para el que parecía haber sido concebido. Pero ese año, el color de la tristeza quedo marcado como el boceto de un atardecer con carboncillo, huérfano de brillo, de luz, de color, pero aun así me lo puse una ultima vez aunque solo fuese para que enjuagase las lagrimas que no era capaz de retener. La soledad nunca había sido tan aplastante, solo el recuerdo iluminaba la porción de mi que se mantenía erguida pese a la desazón de ese momento. Me oprimía el pecho y la congoja impedía que el aire penetrase en mis pulmones imprimiendo una respiración irregular. La mesa quedaba vacía, sin mantel, ni flores que acomodasen una visión agradable, dos copas de fino cristal, sus preferidas y una botella de vino, joven honesto, carnoso, balsámico, frutal su preferido yo y su evocación y una larga noche que preferiría caducada ya.<br />
<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-1404636947583210322013-03-15T12:39:00.003+01:002013-04-05T19:32:38.003+02:00su frágil acento francés se asomo por la ventanilla <div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
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<span style="font-size: large;">giselle-Besalu 3</span></div>
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXlrc7PTAo8M34kgiXzlp1Qnrs8_LohrocYa0juO8IIb55MYvGtLDRGzeJ3PZe1TBuK7k1khVQ_CKmVa4n8aJEeKq2BzLJcEXDIL4N5WpgZYruB95jTAYyX2tmH6XTGc9e9Jf7rg/s1600/IG_4528.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="198" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiXlrc7PTAo8M34kgiXzlp1Qnrs8_LohrocYa0juO8IIb55MYvGtLDRGzeJ3PZe1TBuK7k1khVQ_CKmVa4n8aJEeKq2BzLJcEXDIL4N5WpgZYruB95jTAYyX2tmH6XTGc9e9Jf7rg/s400/IG_4528.png" width="400" /></a></div>
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Nos alcanzo la tarde y nos sobrepaso cuando cruzábamos los últimos túneles del eje transversal, la C25, la nieve se hacia visible a intervalos, era como si el circulo de montañas en el que habíamos penetrado la hubiese despistado, y al momento siguiese nuestro rastro sepultando todo de blanco y al momento siguiente desaparecía descubriendo el paisaje, me recordó las noches tibias de invierno en el que el edredón tan pronto es agradecido y su tibieza acomoda el sueño y al momento siguiente el calor se hace insoportable y hay que retirarlo dejando el cuerpo a la intemperie, para volver a cubrirlo al menor atisbo de frío. Charlábamos apacibles con una suave música de fondo, recorrimos las anécdotas que el tiempo había acumulando desde la última vez que nos vimos lo sentí una confesión liberadora una manera de vaciar el espíritu de dejarlo a cero para poder llenarlo de nuevo. Llegamos sin nieve a la plaza del pueblo buscando el Hotel, perdidos y guiados por el GPS y perdidos de nuevo hasta que con su frágil acento francés se asomo por la ventanilla a preguntar a un señor que gustoso nos acompaño hasta enfilarnos sin perdida. El frío era intenso paliado a duras penas por un sol que corría hacia poniente, aventajaba a las nubes blancas que permanecían oscureciéndose sobre nosotros. Aparcamos el coche al pie de una iglesia, amparado por su macizo muro, las piedras se volvían toscas a la luz de las farolas amarilleando su relieve, como es mi costumbre siempre que me acerco a un lugar construido hace mucho tiempo me acerque a tocarlo. Posé mi mano en uno de los centenarios bloques, me transmitió su frialdad, frío acumulado al sombrío del día, sentí la paz que en estos sitios me embarga, el esfuerzo, los llantos, los gritos, las satisfacciones de siglos guardados como si fuese una lata conserva de sentimientos. La voz de Giselle rompió el vinculo que me mantenía unido a la edificación, me echaba un abrigo sobre los hombros y me di cuenta que había estado demasiado tiempo unido a la piedra. Había entrado las maletas, hecho la inscripción y portaba ya las tarjetas de la habitación, me guiaba como si hubiese estado perdido. La recepción quedaba entre la pequeña cafetería y un saloncito, al frente la escalera y detrás a la derecha el ascensor, subimos a la primera planta, en la habitación me sorprendió el enorme ventanal que daba a la plaza empedrada, la luz mortecina se filtraba entre las cortinas y las farolas iluminaban amarilleando un vaho que se iba aposentando sobre la calle. Hacia calor dentro, a la derecha un cómodo sofá quedaba frente a la escalera de madera que subía al piso superior, una baranda también de madera hacia pensar en una enorme cama. Giselle me miro con su sonrisa picara, portaba una cajita envuelta en papel de regalo, transmitía la impaciencia propia de una niña, frotaba una mano contra otra esperando que lo abriese, me escrutaba el rostro sin decir nada, apaciguaba su respiración la frenaba tanto que dudaba si respiraba, para al momento dar una bocanada de aire con fuerza como si le fuese a faltar y volvía a tranquilizarla de nuevo.<br />
-Desnúdate- Lo dije sin mirarla, deslizando las palabras entre los dos. Vi como mordía su labio inferior con más fuerza.<br />
-Si Señor-<br />
Comenzó a desnudarse con prisa, me miraba, miraba el regalo. Le hice un gesto de atención.<br />
-Fuss- Dije con fuerza. Se poso a mi lado izquierdo a cuatro patas me miraba. Sonreí.<br />
-Hopp- Señale el sofá y avanzando con diligencia se subió en el, su cara quedaba contra la pared y el culo en pompa ofrecido, quedaban las líneas marcadas con un pequeño relieve, empezaba a cambiar la tonalidad y a disminuir el surco. Me puse a su lado, acariciando su pelo, bajaba por la espalda.<br />
-Ja wohl, se lo dije cuando acariciaba su culo, empezó a moverlo complacida. Me senté a su lado y comencé a abrir el regalo. Pensaba en el día que comencé a entrenarla como a una perra, en el collar que le había comprado, la cara de felicidad que puso cuando se lo mostré, lo contenta que estaba hasta que le dije que era un collar de adiestramiento, lo miro, lo toco y vio la cajita que tenia con dos púas redondeadas de metal que salía de ella. Cambio su mirada, una nube oscureció su rostro y la felicidad torno a un gesto de desconfianza, era algo nuevo para ella. Le pregunte si quería usarlo, lo sopeso, lo miro y me miro, sus ojos pedían misericordia pero aun así lo coloco en su garganta ajustándolo, me gusto ese gesto esa muestra de confianza sufrida. Es sencillo su uso le dije, tiene tres funciones, cuando falles una vez escucharas un sonido, tiene varios niveles pero solo usaremos este, presione el botón del mando a distancia y salio un zumbido de la caja, cuando falles la segunda vez notaras una vibración, también tiene varios niveles, presione otro botón y el collar vibro en su cuello de una manera molesta. Cuando falles la tercera vez ya no será un advertencia, será algo mas serio, baje al mínimo el regulador y pulse el botón correspondiente, una pequeña mini descarga estática recorrió su piel, sabia que solo seria un hormigueo pero lo notaria, esta es la posición mas baja y de ahí se puede ir subiendo hasta que sea francamente desagradable, te lo puedo asegurar que antes de dártelo lo he probado yo. Sonreí al recordar ese primer día, la sonrisa me devolvió a la habitación del hotel.<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg7fIMqk3AnIzBTVcmT6M1HBTNpQP-QXnC20hm0DX9K_EHxQpaACkIlFGRWulixyXquAY2BIFWiIedD1UccLgTLP27e15vtwKuvDspM3VdaxIxiejhBxL-JPK_GdmEZBLWVaEV09g/s1600/IMG_0251.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg7fIMqk3AnIzBTVcmT6M1HBTNpQP-QXnC20hm0DX9K_EHxQpaACkIlFGRWulixyXquAY2BIFWiIedD1UccLgTLP27e15vtwKuvDspM3VdaxIxiejhBxL-JPK_GdmEZBLWVaEV09g/s400/IMG_0251.JPG" width="400" /></a></div>
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<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-68946355261141791822013-03-15T10:51:00.001+01:002013-03-15T10:51:21.309+01:00286<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEimpI86QPc44fTgF0T1k2J7wom-zbMoEV0Y2pdXZJ3IDggO9TrpqU87Sdt6-AZYqgLBWaqNDNb0McVo6NKoPr0cTjm3HiCTupTZdJ4szGUMhUflWdxytnu8jxt35kB6wylE-v2ORA/s1600/IMG_0265.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEimpI86QPc44fTgF0T1k2J7wom-zbMoEV0Y2pdXZJ3IDggO9TrpqU87Sdt6-AZYqgLBWaqNDNb0McVo6NKoPr0cTjm3HiCTupTZdJ4szGUMhUflWdxytnu8jxt35kB6wylE-v2ORA/s400/IMG_0265.JPG" width="266" /></a></div>
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<span style="font-size: x-large;">A veces solo es cuestión de girar el mundo para adaptarlo a tus circunstancias.</span><br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg7aOKr5VcGK0OGZ3tS-ZVdXcLQvt7SqgFT3FXLWoLPb4_ejHmZa44BWC1wkk2Jzud8170jT_mWd6WStVxqSNawfKJ7dgQs5AWqm7JRm2N7xirmYVrNmgm6xDIx8CheMq8Ev4Oxmw/s1600/IMG_02651.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg7aOKr5VcGK0OGZ3tS-ZVdXcLQvt7SqgFT3FXLWoLPb4_ejHmZa44BWC1wkk2Jzud8170jT_mWd6WStVxqSNawfKJ7dgQs5AWqm7JRm2N7xirmYVrNmgm6xDIx8CheMq8Ev4Oxmw/s400/IMG_02651.JPG" width="400" /></a></div>
<span style="font-size: x-large;"><br /></span><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-59331331756567092612013-03-10T05:30:00.000+01:002013-03-10T05:30:01.186+01:00renegué al momento de mi primer impulso<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi6rGTfqB4jb5z03DOtrkhoSixoN6bOR4NU56S310T9TOV267JBCL8bPylD2W2aM0wtmTmDhbv7Y8RH42bIhri9KuO73Y1Bx2ZaLvlzi57kcZG7scfsIqgUUrCfxOBR9kxexvKTqA/s1600/bola-de-hielo-01.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="353" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi6rGTfqB4jb5z03DOtrkhoSixoN6bOR4NU56S310T9TOV267JBCL8bPylD2W2aM0wtmTmDhbv7Y8RH42bIhri9KuO73Y1Bx2ZaLvlzi57kcZG7scfsIqgUUrCfxOBR9kxexvKTqA/s400/bola-de-hielo-01.jpg" width="400" /></a></div>
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No se , me sentía distinto, diferente, me encontraba sentado en la barra de un garito de amplia luz indirecta, de decoración extrema y muchísimo vidrio, vidrio del que notas que pesa incluso antes de ver su transparencia, se ensamblaba en hormigón, un hormigón refinado que nada tenia que ver con el que rudos albañiles de cuerpos atléticos y torsos tostados al candente sol del verano trasiegan y arremeten con las gotas de sudor resbalando por la piel, en armazones imposibles de chapa de hierro, chapa igual o diría que diferente que la brillaba en los recovecos que el hormigón y el vidrio dejaban olvidados. El ambiente industrial, decadente que querían imprimir al local lo conseguían a base de mucho alcohol e imaginación de la gente guapa que por allí navegaba, surcando islas fijas que quedaban desamparadas de los focos ocultando unas intenciones o iluminando sus contrarias según te acercabas o alejabas de la barra. Digo que me sentía distinto por que llegaba con sed, y me veía como el último relevo de una carrera de obstáculos que yo no había perdido pero los demás si me habían ganado. Cambio en un momento el concepto de bebida que yo traía preconcebido, me habían halado del lugar y de sus excelencias. Vi a tanta gente, tanta gente guapa con sus henchidas copas de balón en las manos o frente a ellas depositadas en perfecto equilibrio sobre barras o mesas pulidas, de un liquido transparente, burbujeante, algunos con débiles reflejos azulados, o rosas discretos y envueltos en un halo de humedad, como si fuese el aura que da credibilidad a una virgen, con tantos aromas sutiles, a cardamomo, a pimienta rosa, a enebro, a regaliz, canela, a lima verde, enturbiados con jarabe de arce, que renegué al momento de mi primer impulso, del motivo que me había desplazado hasta allí. Me enfrente al camarero mirándolo con suspicacia intentando descubrir en su cara un gesto que me animase a cambiar de parecer y note en su mirada una suplica. Porque no me dije, por que no cambiar la tendencia, en esos momentos eche en falta la seriedad de otros lugares, el filtro que una bebida seria, adulta impone a la entrada y la incomodidad del primer trago y su evolución hacia la excelencia del ultimo. Me deje de tonterías y volví por mis fueros, por lo ancestral, lo que siempre he hecho, algo que me frenase el tiempo y pudiese compartir, no una bebida ajetreada que por moda se había extendido tanto que el tiempo había dejado de ser primordial para la calidad, 3 días, cuatro destilaciones contra 16 años de quietud. Dos maltas con hielo, si puede ser Islay mejor, duró poco la sorpresa del camarero, tan poco que su gesto risueño se me antojo cómplice, por fin uno diferente me dijo. Mis palabras pese a la música moderna que envolvía el bar cayeron a mi al redor con aplomo, salio despedida una onda expansiva que choco con miradas esquivas y oídos abiertos, en un momento se había hecho un vacío en torno a mi, como si fuese portador de una mala enfermedad, agradecí ese gesto, no me molesto en absoluto, me otorgaba un espacio extra a mi y a mis dos vasos de liquido ambarino que despedía un aroma ahumado mezclado con la esencia de un mar bravo, mire al camarero que me había servido, tenia las manos abiertas a media altura una a cada lado del cuerpo con las palmas hacia adelante, como si fuese la estampita de un santo y un mohín en la cara que lo decía todo. Es el tributo que hay que pagar por ser diferente creí oír de sus labios que no dijeron nada. No paso mucho tiempo cuando ya se iban acercando de nuevo a mi lo que supuse que eran desechos de esa modernidad, inconformistas pero con pocos huevos para romper la tendencia, la hegemonía del Gin Tonic se había impuesto y ellos habían sido arrastrados por la marea que circulaba mostrando sus blancas dentaduras mas de lo que era imprescindible. La mas cercana a mi era una morena de vestido rojo ajustado que cuando entre la vi apoyada en la pared a mi izquierda soportando una conversación que se le escapaba del bolsillo a un tipo con americana de espiga color miel, sus ojos denotaban aburrimiento y sus extremidades un laxa actitud de inconsciencia soportada, la copa que mantenía de liquido se asemejaba a los montajes que había visto en una floristería, el exuberante verde sobresalía hasta la exageración. Tomo uno de mis vasos el que había quedado a mi derecha y yo no había probado, sin prisa la note mascar la bebida, por un momento fui liquido y sentí como me estrellaba contra su paladar, como me volteaba con agilidad en la boca exprimiendo todo la esencia y jugueteaba con la lengua apoderándose de la salinidad que envuelta en humo terminaba por enredarse entre sus dientes. Su acompañante nos miraba en la distancia con las dos copas en las manos y la mirada postiza forzada a recomponerse ante la incredulidad del momento. Por fin un Whisky en una Whisqueria, cuando perdimos el norte y nos dejamos arrastrar por el tumulto me dijo sin esperar respuesta. Bebimos por que es una bebida para compartir, una bebida compleja que necesita de la complicidad y del tiempo mientras las copas en las manos de los demás iban tornando de color, como el reflejo de un amanecer que devuelve el colorido que la noche ha usurpado. Dejamos que la bebida tomase nuestro pulso y nos obligase a hablar sin palabras, y las miradas daban paso a las caricias y las caricias a ........... Pero eso ya es otra historia, nada tiene que ver con el ginto que me habían asegurado perfecto y termino siendo un Islay.<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0Sangüesa, Navarra, España42.574068213769685 -1.282310485839843842.550682713769682 -1.3226509858398439 42.597453713769688 -1.2419699858398436tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-85414417214528742482013-03-08T13:13:00.000+01:002013-04-05T19:31:53.792+02:00...dice, ey nena, date una vuelta por el lado salvaje...<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
giselle-Besalu 2</div>
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHyWYMBauxu4iIiGWjCt3gpNYg_doaUa-KRhvceEcwTDPIiJU3dnXwX9BmsVSl8wwWeeZxe33eI4saTR6SHa8qJs7FjEwE3AKbhSVyzvHtmf6VEepyXWCNYlHmmMIY7wHuYGdxuQ/s1600/IMG_3928.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHyWYMBauxu4iIiGWjCt3gpNYg_doaUa-KRhvceEcwTDPIiJU3dnXwX9BmsVSl8wwWeeZxe33eI4saTR6SHa8qJs7FjEwE3AKbhSVyzvHtmf6VEepyXWCNYlHmmMIY7wHuYGdxuQ/s400/IMG_3928.jpg" width="310" /></a></div>
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La nieve nos perseguía almidonando unas huellas imaginarias, igual que cuando aparece un pensamiento y sobre ese mismo pensamiento vas enrocando otros y va tomando cuerpo una historia que nada tenia que ver con la que comenzó, capa sobre capa y se vuelve tan efímero que al menor quiebro de una idea se desvanece todo dejándote en un momento en blanco sin saber donde estas o como has llegado. Así quedaba el paisaje, un manto blanco que tras usurpar su textura enseguida volvía a retomar su esplendor sin ninguna otra prioridad que verse magnifico. Zaragoza se erigía nítida entre la neblina de la mañana, su silueta con el Pilar bien marcado se perfilaba en medio de la nada, surgiendo como un manantial que brota sin esperar que sea el sitio adecuado, la nieve respetaba la ciudad y dejaba una nota de color que rompía con el blanco que hasta ahora y ya cansino nos acompañaba. El tráfico a esas horas era fluido y bordear los barrios periféricos no fue ningún problema, las vías rápidas descongestionaban con garbo los vehículos que surgían por los aledaños y carreteras menores. Duró poco el espacio multicolor y enseguida empezamos a ver el frío que surgía de la tierra buscando otro frío que caía de arriba, nos encontrábamos en medio rompiendo con el coche la quietud y sintiendo, viendo ese frío, como en pocas ocasiones se puede ver. Tras el, llego de nuevo la nieve empezábamos a subir con suavidad hacia los Monegros y el paisaje retomaba el blanco, primero en los sombríos manteniendo la nieve vieja, y después ya en todo el contorno. Giselle permanecía callada en uno de esos silencios que a veces la acompañaban, silencios que le robaban la expresividad de su rostro, silencios que embargaban el brillo de su mirada, silencios que la mantenían aletargada en la oscuridad de su alma. Cuantas veces le preguntaba por ellos y cuantas veces me respondía con mas silencio, entonces no me queda mas que elucubrar, buscar yo en el conocimiento de su vida el causante de esas salidas del mundo. <a href="http://eldulceencantodeladominacion.blogspot.com.es/2011/03/historias-de-giselle-2.html">Recordé el pasaje que me contó una vez sobre la historia de su familia</a>, siempre partía de el para comprenderla y meterme en su mente, la fortaleza que emanaba de esa historia y había hecho suya, superando así el escalón y rebasándolo, sabia que habían quedado grietas y que a veces necesitaba de tiempo para volver a cubrirlas con sensaciones nuevas y evitar así que se resquebrajase del todo su voluntad. Lo entendía como un tributo a pagar, una ofrenda a un Dios que permanecía en su interior y requería a veces de un sacrificio para dejarla tranquila el resto del tiempo. Deje que Lou Reed me recordase una breve historia de Nueva York con el coche detenido en el área de descanso de Fraga.<br />
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Candy vino de fuera de la isla,<br />
en la parte de atrás (de los bares) era la querida de todos,<br />
pero nunca perdió la cabeza,<br />
ni siquiera cuando hacia una mamada, ella dijo:<br />
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Ey nene, date una vuelta por el lado salvaje,<br />
dice, ey nena, date una vuelta por el lado salvaje,<br />
y las chicas de color dicen, du,du, du...<br />
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Puso su mundo en movimiento cuando sintió que yo había detenido el coche, sin ningún esfuerzo su sonrisa volvió e ilumino su cara, en su mirada dulce parecía nacer un amanecer nuevo prometiendo un encuentro idílico en el paraíso. Besé con delicadeza sus labios sintiéndolos temblar, su calor se mezclo con el mío y dio pie a sentir como se oscurecía el exterior para ambos a pesar de la blancura de la nieve, nos deleitamos en descubrir las caricias mas ocultas. Giraba la cara y estiraba el cuello marcando el camino que mis labios debían seguir, era un gesto sencillo no buscado, tan solo dejaba que su cuerpo marcase lo que quería sentir, me entretuve en el cuello y subí hacia la oreja, lamí el lóbulo, lo bese y comencé a recitarle palabras que sabia que enervarían su celo. Separaba las piernas despacio dejando al descubierto la puerta de entrada al centro de su placer, la conocía demasiado bien para saber que me provocaba, que esperaba de mi que penetrase en ella con fuerza, que mis dedos arrebatasen al guardián de su puerta la conciencia de protegerla. Y ella sabía que debía esforzarse más para provocar en mí el deseo irrefrenable, me beso el cuello despacio rozando mi piel de una manera tan liviana que el roce de una pluma me hubiese parecido una caricia tosca. Nos saltamos el café y con la fogosidad prendida de la chaqueta nos encerramos en el cuarto de baño de mujeres de la gasolinera. Follamos sin preámbulos, pantalón abajo, vestido arriba, apoyada sobre la cisterna un poco elevada y con sus piernas en mi cintura. Acariciaba sus nalgas desnudas, recorría complaciente las marcas que quedaban de la noche anterior, las líneas que se hacían surcos todavía abultados que había dejado el ratán, no había delicadeza, no había sutileza, la ternura anterior había caducado, tan solo había sexo, un recuerdo animal que nos atrapo por completo y nos desbordo antes de poder ponerle coto.<br />
<br /><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-50536468881612481842013-03-07T18:07:00.000+01:002013-03-07T18:23:29.673+01:00Lo que da de si<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg84Bp7ISIzhw-zcOeXaBgTh87O55mRAoLWLPlt-hcx0b2r9oMc4EhUUHWerP4SFBCht5v3Wojl6L7FX4PyocR4B2BQMhNfHi5VHVpXr2GNX7Psnv-xHMtia2VSlQKTAgKJ7VcyZQ/s1600/50-sombras-de-grey.png" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEg84Bp7ISIzhw-zcOeXaBgTh87O55mRAoLWLPlt-hcx0b2r9oMc4EhUUHWerP4SFBCht5v3Wojl6L7FX4PyocR4B2BQMhNfHi5VHVpXr2GNX7Psnv-xHMtia2VSlQKTAgKJ7VcyZQ/s400/50-sombras-de-grey.png" width="400" /></a></div>
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Debo confesar que no he leído la trilogía de las 50 sombras y de momento no voy a hacerlo, aunque quizás por curiosidad cuando me deshaga del montón de libros acumulado lo afronte, allá por el verano que la lectura es mas liviana. Sigue siendo a pesar del tiempo pasado el libro o los libros más solicitados de la biblioteca pública de este lugar. Por eso no es de extrañar que en las cenas, en corrillos de las amigas o de las mujeres de los amigos siempre aparezca el cometario con risa tonta o el rubor escandalizado que más que de una mujer hecha y derecha parezca ser de una jovenzuela. En esos momentos si que me disgusta no haberlo leído, por que aunque sea ducho del tema, no lo soy de ese tema y es difícil entrar en la conversación cuando se desconoce el fondo, alguna vez que se me ha ocurrido aclarar algún punto de sus comentarios matizando y profundizando, las miradas cruzadas que recibo sobrepasarían el limite del rubor y del escándalo comedido, por supuesto en mis comentarios se me olvida mezclar el toque demasiado romántico de novela rosa. Eso no pasa de ser una anécdota con más o menos gracia que a veces tras una picara frase o un sonoro cachete termina en risas descontroladas, hay que guardar apariencias y no pasar de ahí, que las amistades son de largo y deben seguir siéndolo, que es lo que me gusta. Lo que realmente me ha sorprendido es ver en farolas, contenedores de papel, no se por que solo en los de papel y por que no en los de vidrio o en los de la basura, será por que ellos tiran la basura y el vidrio y ellas el papel, y en algún otro punto estratégico de bastante paso, unos papelitos, como las etiquetas que se pegan en los sobres, ósea autoadhesivos para no perder tiempo en pegarlas, con un texto curioso; LICENDIADO en BDSM a ALUMNA, castigos, disciplina, seriedad, D/S, un correo electrónico de Hotmail y un teléfono de los que empiezan por 6 ósea móvil, termina con una relación seria y discreta. Y me pregunto yo, donde se licencia uno en BDSM y lo de D/s es Dominación sumisión o será disciplina y seriedad. Pasé unos días con un azogue en el cuerpo que era un sin vivir, me interesaba a mi conocer a un Licenciado en BDSM sobre todas las cosas, entablar conversaciones con el y que me pudiese iluminar con su saber. Así que sin quererlo se convirtió para mi en algo prioritario, tenia un cometido y muchas dudas, si llamaba y hablaba con voz de hombre acabaría pronto la conversación, eso lo suponía, no se porque se me antojaba así, quizás por lo de alumna en genero femenino, si escribía un correo tendría que crear una cuenta nueva con Nick femenino por supuesto, aun no había empezado y ya me estaba cansando, que dilema. Opté por una decisión salomónica, aprovechando que en el trabajo el numero de teléfono es oculto llamé, pero interferí un poco en la realidad, ósea era el marido complaciente de una pareja liberal con una mujer sumisa y tímida y ella quería probar todo lo que salía en el libro y mas pero no se atrevía a llamar por su pudorosa condición. Así que sin mas preámbulo y sin tan siquiera fraguar en mi mente la conversación, no lo creí oportuno por que me daba a mi un no se que o un que se yo, que no habría muchas luces que apagar.<br />
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-Diga<br />
-Hola buenas tardes, que he leído un anuncio con este numero y me interesa.<br />
-Que te interesa, que? Que coño te interesa.<br />
Empezaba a notar un acaloramiento por el cuerpo, me mordía la lengua por no saltar pero el guión había que seguirlo y si suponía tener que aguantar alguna chabacanada pues adelante.<br />
-Si molesto cuelgo, que no voy a hacer el gilipollas. Silencio.<br />
-Perdona pero es que hay cada uno que no veas, de que anuncio me hablas?<br />
-Uno que he leído Licenciado en BDSM, es que tienes mas anuncios?<br />
-Joder pues claro, que te piensas.<br />
-Nada, no me pienso nada.<br />
-Pero con hombres yo no quiero nada.<br />
-Si es BDSM dará igual, no? la sumisión es sumisión sea del genero que sea y de lo que se trata es de sentir la Dominación y la sumisión, no?<br />
-Pues no, de lo que se trata es de follarme a una puta perra. Así que no me jodas que soy un tío y con hombres no quiero nada.<br />
-Perdona, que no es por mi, mi mujer que se ha empeñado en probar lo de las sombras y no hace más que darme la tabarra.<br />
-Coño un cornudo.<br />
-Visto así quizás, pero no. Somos liberales cada uno hace lo que quiere siempre que el otro se entere y así vamos tirando, pasándolo bien cuando nos apetece.<br />
-No tires nada que no están las cosas para tirar, jajá jajá<br />
-Como?<br />
-Nada que es una broma, por lo de vamos tirando. Y por que no me ha llamado ella?<br />
-Le da vergüenza, es muy tímida y me ha pedido que llame yo. Y como yo de eso no se nada pues mejor busco a alguien que sepa y de paso si puede ser que me enseñe.<br />
-Como es?<br />
-Como es que?<br />
-Ella, coño.<br />
-Ahhh 1.70 rubia, 95 de pecho, buenas caderas para cabalgarla, tiene un buen agarre desde atrás, le sobran uno kilos pero nada importante, como es alta ni se nota-. Intentaba lanzar el cebo.<br />
-No será una puta gorda?<br />
-No, coño no, no te digo que esta bien, un par de kilos nada más.<br />
-Bueno te voy a creer pero por que me has caído bien, puto cornudo.<br />
-Cuidado que yo no soy sumiso y mido algo más de 1.70.<br />
-No te mosquees tío que es una broma, quería saber si tu también eres sumiso.<br />
-Pues no, por ahí no sigas. Me vas a enseñar?<br />
-Enseñar a que?<br />
-No eres licenciado? pues para eso hay que saber, así que lo que sea. Normas básicas, técnicas, seguridad cosas de esas que hay que saber antes de hacer algo que conlleve riesgo.<br />
-Que riesgo ni que leches, si esto es follar. Unas cuerdas de adorno, unas esposas de esas que parecen de peluche, una fusta, dos ostias y gritos, muchos gritos, cuando gritas se cagan por las patas abajo, si lo único que buscan es que las follen y les den caña. Así que ya la has Dominado y cuando te aburres de ellas las dejas y otra nueva.<br />
-Ósea que esto es un chollo, se folla gratis y vas cambiando de coño cuando te aburres.<br />
-Aprendes pronto chaval. Cuantos años tiene tu puta?<br />
-No te pases, que no es ninguna puta.<br />
-Eso es lo que tú te crees, si busca esto es que lo es.<br />
-Bueno, si tú lo dices.<br />
-Claro que lo digo. Me calle, que es lo que procedía, para continuar.<br />
-31. -Silencio, en ese momento me pareció escuchar el sonido de una cremallera pero no lo pude asegurar, por que ya no podía aguantar más la risa- Esta buena que te cagas, además la chupa como las diosas y el culo esta abierto para lo que haga falta. Si quieres te envío una foto y tu decides.- Quise escuchar respiración agitada y algo que me pareció un choff.<br />
-Si, envíamela.- Busque una de las fotos que tenia guardadas de la red, una en la que no viese una cara, solo cuerpo y pelo y la envié.<br />
-Ostia tu, si que esta buena, y con el coño pelado, ya sabia que eras de fiar.<br />
-No tienen que tener las sumisas el coño depilado? Me ha parecido que te extrañaba.<br />
-Bueno, no necesariamente, la mayoría lo tiene con pelos, pero mejor así, mas limpia.<br />
-Estas seguro?<br />
-Seguro. Pues claro, quien es el que tiene experiencia? Que coño te pasa es que no te fías?<br />
-Bueno. Lo que tú digas. Cuando nos podemos ver?<br />
-Mañana mismo, por no decirte esta tarde. De donde sois? -Le dije el pueblo- Genial me toca cerca- Pensé entonces que había empapelado una amplia zona.<br />
-Donde quedamos?<br />
-Me desplazo, puedo ir a vuestra casa.<br />
-No es mejor primero quedar para tomar algo o comer y ver si encajamos o mejor dicho si encajáis?<br />
-No hace falta, esta buena y a mi me sirve.<br />
-Pero si a ella no le gustas?<br />
-Ya te digo que si, Seguro que si que le gusta, es una puta y a las putas les gusta que les den caña nada más.<br />
-Bueno, si tú lo dices - Me entraba la risa y a duras penas podía sacar la voz seria -. Y que le harás cuando la tengas delante? Silencio, largo silencio. Pensé que de nuevo comenzaba a tenerla dura.<br />
-Pues yo que se, lo que venga.<br />
-No hace falta conocerla, ni elaborar un guión, tener un plan? no se algo?<br />
-Para que? Ya no aguantaba mas y suponiendo que estaba en el momento álgido.<br />
-Para ser una persona normal y no ser un puto CABRON, APROVECHADO, por ejemplo-. Me arrepentí al momento haber dicho eso, no por que no lo sintiese, sino por que había perdido la ocasión de seguir disfrutando un rato más. Colgó y nunca mas se supo, salvo que al día siguiente las pegatinas que había visto días antes estaban medio arrancadas, aprovecharía el amparo de la noche, o una gran dosis de disimulo para hacerlo.<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkHscBT3FNXwPKMSaFRPHXanwPIsodhAzcVzr3AnGUMuWizNsOzeoi5AkX8e3MCKNc5fRqBFnK_RgNRT_M_eZnLhR__KULqaZTg9Y1Xa0vmN4VRv8Zkh-owIQMe8A8CRdlQ43tgQ/s1600/IMG_4432.JPG" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="300" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjkHscBT3FNXwPKMSaFRPHXanwPIsodhAzcVzr3AnGUMuWizNsOzeoi5AkX8e3MCKNc5fRqBFnK_RgNRT_M_eZnLhR__KULqaZTg9Y1Xa0vmN4VRv8Zkh-owIQMe8A8CRdlQ43tgQ/s400/IMG_4432.JPG" width="400" /></a></div>
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<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-9369302592921143492013-03-07T13:05:00.000+01:002013-03-07T13:05:00.868+01:00Y, si quieres aprender .....<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="http://kedin.es/madrid/que-hacer/un-taller-para-desmontarlos-mitis-de-50-sombras-de-grey.html"><img border="0" height="266" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjx1T8VR54v8Fl4rCz12m_K0Bg_fg1-W2tr4-iH7ILTNogzZ259AGJko-HDTGVNr_sR85yiN1zewezp86TOH49uofi9gvoJiO7fHrjHfV8fFhrK_uwzJf9w_txxxnIuKCixORCb5A/s640/big_50_sombras_de_grey.JPG" width="640" /></a></div>
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<h1 class="big_title" itemprop="name" style="text-align: center;">
Un taller para desmontar los mitos de '50 sombras de Grey' </h1>
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<a href="http://kedin.es/madrid/que-hacer/un-taller-para-desmontarlos-mitis-de-50-sombras-de-grey.html">http://kedin.es/madrid/que-hacer/un-taller-para-desmontarlos-mitis-de-50-sombras-de-grey.html</a></div>
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<span style="font-size: x-large;">Pregunta</span></div>
<br /><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-30621978479285951652013-03-05T13:05:00.000+01:002015-01-29T12:59:19.535+01:00...de pie mirando su cuerpo vencido, su sueño orgulloso y su gesto jovial...<div class="separator" style="clear: both; text-align: left;">
giselle-Besalu 1</div>
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgM_DhyIVDFS7PmKN5UOM-71fVfhVGGrpZWQH46crEwy8UXnxFQWcHAWZ2PQ0zDQDK9f3XJHCZkwbg7ENBKRyx9QR3wULBL5FXfy5W6boRkLZGqDrqtQQoUXhrkMkGBuXWS8kZJeQ/s1600/IMG_4623.gif" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgM_DhyIVDFS7PmKN5UOM-71fVfhVGGrpZWQH46crEwy8UXnxFQWcHAWZ2PQ0zDQDK9f3XJHCZkwbg7ENBKRyx9QR3wULBL5FXfy5W6boRkLZGqDrqtQQoUXhrkMkGBuXWS8kZJeQ/s400/IMG_4623.gif" height="400" width="312" /></a></div>
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Amaneció con la luz pálida de un cielo cubierto de nubes algodonosas de gris claro tirando al blanco como la panza del Platero de Juan Ramón, el sol quedaba oculto como la bombilla de una lámpara tras la pantalla que difumina su luz. El viento había calmado los rugidos de la noche y se tumbaba apaciguado sobre el suelo. El frío mantenía su ser, se despojaba del escozor del alba y se acomodaba para acompañar el día de la misma manera que te acompañan las visitas en una larga tarde desapacible a la hora del te. Giselle dormitaba enfurruñada en su duermevela, quedaba a la vista el sonrosado pezón izquierdo, aun mantenía la forma, alargado, duro como si el descanso no fuese con el, cada roce con el edredón lo enervaba, si te fijabas bien en el se veía la desazón con la que había quedado marcado en la noche, ligeramente deformado aplastado en vertical se resistía a recuperar su forma original. No sabría decir en que momento las pinza se desprendió de el aunque por las visibles marcas no debía hacer mucho rato, algún profundo y alterado sueño movilizo de forma exagerada sus manos y estas arrastraron tras de si las esposas que unidas por la cadena mantenían la distancia justa entre los pezones y ellas. No parecía haberle molestado la incomodidad de la postura, ni el dolor provocado por la ausencia de la presión, su cara permanecía risueña, destilaba un conjuro de felicidad, el sueño debía ser agradable cuanto menos o quizás era el momento, el recuerdo de la noche. La contemple largo rato, bordeando la cama y buscando los diferentes ángulos de su complacida anatomía, si la felicidad se puede describir ese era un buen retrato de la misma, de pie mirando su cuerpo vencido, su sueño orgulloso y su gesto jovial, me sentía bien, perfectamente bien. La deje dormir, prepare café y subí al salón del piso superior, me senté en el sillón de relax tapado con la manta de visón y me dispuse a entablar una conversación con los primeros copos de nieve que comenzaban a caer. Caían sin intención dejados a la casualidad, flotaban en el vacío largo rato antes de decidirse a perecer. Eran diminutos, chispitas heladas que chisporroteaban sin ningún patrón danzando a su libre albedrío. Me dio por pensar en mí pasado en la despistada casualidad que me había alejado de lo que me gustaba, en la enfermedad que había restado en mí seguridad y en lo que me estaba costando recuperarla, los vaivenes a los que me veía sometido por mí propia forma de ser. La perfección con la que me gusta afrontar las cosas lastraba en mi cualquier avance emocional postergaba mis relaciones a otro plano que no quería soportar, o mejor dicho que no quería que otras personas afrontasen en mi nombre y se viesen implicadas en desenlaces desagradables por mi culpa, por culpa de mi enfermedad. Giselle era diferente había estado ahí antes, estaba en mi vida desde hacia mucho tiempo, antes de la enfermedad, durante la misma y después de ella. Viene y se va, el vínculo entre ambos es liviano por decisión de los dos desde el principio y los encuentros ocasionales en el tiempo se ven frenados por la distancia, demasiada distancia entre Reims y Navarra. La amistad que se fraguo entonces perdura, por encima de cualquier relación emocional, la llamo y viene, jugamos, disfrutamos y se va, aparece, llega, jugamos, disfrutamos y se va, tenemos esa complicidad que nos ampara por encima de las inclemencias del tiempo, por encima de la nieve que ya empezaba a fraguar. Los copos se habían abierto como penachos de algodón que cernidos por unas manos invisibles bajaban sin precipitarse, mostrándose con todo su esplendor el tiempo necesario para que pudiese admirarlos, se teñía el paisaje de un opaco blanco que escondía los montes que momentos antes me desafiaban enfrente. El aroma del café despisto mis pensamientos devolviéndome a la realidad y esos pensamientos fueron correteando desperdigándose buscando una salida por donde evadirse, poco a poco se fueron disipando y yo con ellos ya lejos retomaba mi vida tal y como estaba en ese momento, la opresión del pecho hacia mucho ya que se había desvanecido y de alguna forma me remitía a una seguridad que sentía crecer, Giselle estaba abajo dormida, esperando que la despertase para emprender nuestro viaje. El coche había quedado cargado en la noche para partir en cuanto nos levantásemos y después de desayunar sin perder tiempo aprovechando la escasa luz del día.<br />
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<br /><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-7438861797637893802013-02-26T19:41:00.000+01:002013-04-05T19:29:45.141+02:00...con su propia pasión extrapolada en mi....<br />
La visita de Giselle<br />
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" ...Que todo su ser transformado en fiera buscaba un domador."<br />
(Donde Mejor canta un Pájaro)<br />
Alejandro Jodorowsky<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhWw6X3Zg-OqcTbSU91I86iwTJt-O1U5qzjII_sERVy58xBBWid9YNQbv-h9rHVy4Z_thrskvgbRmvzr8lh8KO7gCy0ZpnyAmDTli4SY_6PxXz3x_T-99zw8u40o6J1mWKi-sQE7A/s1600/Img_4621.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhWw6X3Zg-OqcTbSU91I86iwTJt-O1U5qzjII_sERVy58xBBWid9YNQbv-h9rHVy4Z_thrskvgbRmvzr8lh8KO7gCy0ZpnyAmDTli4SY_6PxXz3x_T-99zw8u40o6J1mWKi-sQE7A/s400/Img_4621.jpg" width="322" /></a></div>
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Llego como lo suele hacer ella, sin trompetas de anuncio, en silencio, sin esperar recibimientos, en una mano una bolsa de papel de charol rosa, brillante, en la otra el bolso de viaje que le acompaña siempre en escapadas cortas. Iluminó con su sonrisa mi despacho igual que lo hace siempre cuando viene a verme, sin artificios, sonrisa franca. Su imagen proyectaba una visión distinta, sorprendente esta vez por lo exagerado de su atuendo, tan contraria a como suele ser ella, sencilla. Unos botines grises con plataforma la anclaban al suelo, unas medias de punto también gris pero en un tono mas claro con cintas de raso rosas entrelazadas ascendían por sus piernas hasta perderse bajo una falda en tonos grises y rayas rosas, cortísima, parecía que en cualquier momento sus nalgas asomarían bajo ella dejándose ver, abullonada por un tul gris mas oscuro. En el cuerpo se pegaba una chaqueta de punto gris que parecía proteger a un jersey finísimo rosa que encajaba a la perfección con la blancura de su rostro, tierno, el pecho se marcaba prominente, ajustando su silueta. El viento frío se había encargado de enervar sus pezones que satisfechos exhibían su pujanza, ya no se molestaba en frotarlos para intentar que se deshinchasen como hacia al principio cuando la conocí, los lucia orgullosa, los dejaba expuestos para mi goce y disfrute. Sus labios seguían henchidos provocando en mí una turgencia que era difícil disimular. Sus ojos caramelo me miraban con suavidad endulzando el ambiente, anticipando el horizonte a su propia mirada. Allí estaba Giselle estática, manteniendo su propio equilibrio sobre los altos tacones de los botines, le sonreí poniendo en el gesto de mi cara toda la intención de un cálido abrazo, soltó los bultos que pendían de sus manos y avanzo hacia mi, su andar era artificial, aunque me gustó, se movía despacio adelantando las caderas, a cada paso era como si su pelvis se abriese y se cerrase, pensé mas en el coño y menos en el hueso. Me levante para tomar sus manos envueltas en guantes de fieltro rosa con detalles de florecitas grises, la mire y mire, recordando con mi vista su cuerpo, recorriéndolo sin ropa, rebuscando sus lunares, sus pliegues y mis rincones favoritos de su anatomía. La bese con pasión, con su propia pasión extrapolada en mi, nos pusimos al día en silencio dejando solo que los labios continuasen con su acalorada refriega. Pasó ante mí el olor de Lola que ella traía, su textura, y la textura de caricias de otras personas que yo no conocía. Hace frío aquí también me dijo cuando tomamos un poco de distancia. Se la veía esplendida y me apetecía descubrir lo que ocultaba el ligero tul, le ofrecí asiento sobre la mesa frente a mi sillón, la ayude a subir, a aposentar su culo desnudo sobre ella, las medias terminaban en una lazada de la cinta rosa en la parte trasera de sus muslos justo un poco antes de que estas cambiasen a nalgas. La postura le obligaba a separar las piernas, a buscar un ángulo que le permitiese estar cómoda y no dejar colgando a la casualidad sus torneadas piernas. Yo miraba en su interior y ella se sonrojaba, hablaba y hablaba como cada vez que se ponía nerviosa, volvía a mirarla, a su entrepierna, a su cara y empezaba a aspirar el celo que discurría ya de dentro de ella hacia el exterior. No encontré la ropa interior que ya había supuesto rosa, su coño se abría desnudo a mi vista mostrando el brillo que delataba su placer. Me regocije de la vista, de tenerla delante de mi a mano, de su pausada exhibición y agradecí ese don que tiene de aparecer siempre cuando mis ánimos están decaídos. A mi indicación separo los labios de su coño con las manos, presionando en la parte alta para dejar al descubierto el clítoris, salía hacia el exterior creciendo, mendigando una caricia, buscando cualquier elemento duro para frotarse, el diminuto apéndice se enfrentaba a mi, tensando en el, todo el cuerpo de Giselle. Su dedo índice lo golpeaba con certera pericia, provocando con cada golpecito un escalofrío que la recorría, sabia de su sensibilidad en esa parte y sabia que seria insoportable para ella continuar así mucho tiempo, acelero la cadencia de los golpes y su cuerpo se contorsionaba en espasmos que intentaba refrenar, espere aletargando el momento. Permití que dejase de tocar el clítoris y volvió a esconderse tras el capuchón de piel que lo protegía, al soltar las manos el coño fue replegándose sobre si mismo y cerrándose, como queriendo guardar en su interior todo lo que hasta ese momento había destilado. Bajó de la mesa y me mostró lo que portaba en la bolsa rosa, aunque lo supuse, se de sus gustos y sabe de mis gustos y se que lee lo que escribo, dentro estaba la botella de Champagne G.H. Mumm edición especial y los Biscuits Roses de la Maison Fossier. Me sugirió con la mas picara de todas sus sonrisas, con el labio inferior delicadamente mordido entre sus dientes y levantando el tul con la falda mostrando todo lo que se puede mostrar, retomar el viaje que la ultima vez que nos vimos había quedado enterrado en la nieve. Es imposible resistirse a tan grata muestra de devoción y empecé a trazar en mi mente la ruta que mejor nos llevase a la Garrotxa, a Besalú, en medio de una alerta de temporal de nieve, pero eso seria al día siguiente, nos quedaba disfrutar de la tarde, de la noche.</div>
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<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-80552520355905505372013-02-14T19:00:00.000+01:002013-02-14T19:00:03.654+01:00Un día masQue ya que esta frío, lo aprovechamos. Alguna voluntaria para esta noche?<br />
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<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhkmrrF3khnXaZewLhx6U_B0iCnCcZh6SSIoCoIRTXE7JoDzf6f_muKmvdg2tss6Q1bUk1jfCSsKfBrIQLRlcd1knl26vUo6_DXBJP2jcGqu1Ppi7cfIWyknugtHhLneuX54kWEXA/s1600/42305.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="640" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhkmrrF3khnXaZewLhx6U_B0iCnCcZh6SSIoCoIRTXE7JoDzf6f_muKmvdg2tss6Q1bUk1jfCSsKfBrIQLRlcd1knl26vUo6_DXBJP2jcGqu1Ppi7cfIWyknugtHhLneuX54kWEXA/s640/42305.jpg" width="640" /></a></div>
<br /><div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-64832361897116899432013-02-14T11:06:00.000+01:002013-02-14T11:06:32.044+01:00...sintió la caricia como si fuese impúdica...<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYdLnCZwEike5bWCv02tS9xhRrL3XP9bAqvhD28mtf2-NO6By853ClBg_uJouhSnlOhoDYh6gI92ChZRCDbfzN7P_51ZqGCN7jyHs8VjYf4ioFuvOgpeMCBsHHsNJ6VsQdHv4toA/s1600/600770_331582536959644_2016965540_n.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgYdLnCZwEike5bWCv02tS9xhRrL3XP9bAqvhD28mtf2-NO6By853ClBg_uJouhSnlOhoDYh6gI92ChZRCDbfzN7P_51ZqGCN7jyHs8VjYf4ioFuvOgpeMCBsHHsNJ6VsQdHv4toA/s400/600770_331582536959644_2016965540_n.jpg" width="361" /></a></div>
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Llovía sin cesar en esa tarde noche de un mes de febrero mediado. En la puerta de local pretendía esconderse bajo las luces de neón, una figura quería pasar desapercibida. El suelo del aparcamiento jugueteaba con el cambio de color que reflejaban los charcos de agua, hacia horas que ningún coche había irrumpido en el rompiendo esa postal que hipnotizaba la vista, que con placidez ajena al temporal invitaba a soñar, la atención se centraba en ese colorido artificial que hábilmente movían las gotas de agua y a veces acercaba y otras alejaba de lo que la realidad se empeñaba en mantener inmóvil. En otros tiempos ese día, había sido un día especial en si, e intentaba revivir, recrear el último en el que se sintió plena, completa. La figura que se guarnecía encogida en el portal intentaba centrarse en aquella ultima vez, se esforzaba por poner nombre a cada cosa impidiendo así que la mente le jugase una mala pasada y volviese a reescribir la historia a beneficio propio, como lo había hecho en ocasiones anteriores. Hoy no, el día olía a invierno, si de alguna manera las estaciones tienen olor, olía a invierno como el invierno que sentía en su corazón, pero hoy quería la realidad por muy fría y distante que fuese, como la desapacible noche, no quería el calor de su imaginación, no quería la cercanía de sus sueños, quería la realidad, quería enfrentarse a la cruda realidad por muy alejada que la dejase. En esa oscuridad creciente protegida por la falta de clientes divagaba en deseos inconclusos, en lo que pudo haber sido y no fue, en su cobardía, en la celeridad con lo que quería todo, le quemaba ese recuerdo que ya sentía lejano. había dejado ya de pensar en culpas, había dejado de buscar motivos con los que culpar, había dejado ya de evadir responsabilidades, la actitud siempre es mas importante que la aptitud, o al menos así se lo había enseñado el. Se dio cuenta que la tarde había pasado y ya solo quedaban unos minutos para la hora, tras su espantada de aquella vez ella había desaparecido y a escondidas lo vio llegar otros días, se sintió mal espiando, pero no quería entonces hacerse ver. Después, cuando ya se enfrento a sus miedos y los venció, espero muchos días en el mismo lugar pero el no apareció y ya no lo volvió a ver, siguió sus huellas pero no llevaban a ningún sitio, se había esfumado su rastro, hasta el olor que recordaba de el parecía evadirse, poco a poco fue debilitándose el recuerdo como si nunca hubiera existido, incluso llego a pensar que todo había sido un sueño, un buen sueño, aunque las marcas en su piel que había dejado eran reales y no se veía a si misma haciéndolas. Si, le gustaba el dolor, pero no el autoinfligido, le gustaba que otro lo provocase y ella orgullosa aguantaba, para satisfacción de ambos. No salía ningún sonido del local, se percato quizás demasiado tarde, en otras ocasiones había música sonaban melodías pegadizas, dulzonas, de las que te inspiran para el baile y hacen que cedas tu cuerpo a otras manos para que te guíen, te toquen, te posean al ritmo de la percusión, melodías que incitan a la lucha por poseer un espacio que momentos antes había ocupado tu cuerpo. Una contrariedad con la que no contaba, la ultima vez el local era bullicioso, las risas te recibían antes de llegar a la puerta, hoy no, la tarde tan desagradable, la crisis, había pensado, había achacado a eso la falta de trafico, de clientes, al ver las luces encendidas lo demás lo había dado por hecho. Se le revolvió el cuerpo, los nervios subieron con rapidez golpeaban las sienes, retumbando, aceleraba su pulso y disminuía la necesidad de comprobar que estaba abierto, sentía el miedo, la decepción de haber llegado tarde de nuevo. Quería y no quería abrir la puerta y comprobar que todo seguía igual, que la barra alargada a la derecha seguía soportando sobre ella las lámparas Tiffany que jugueteaban con la luz y los colores, los cómodos sofás tapizados en terciopelo rojo a la izquierda, en los que ella se sentaba, frente a los sillones Chester de cuero desgastado donde el se sentaba frente a ella. Las chicas de cuerpos macizos, ligeras de ropa que reían y bailaban y alquilaban su amor en fracciones de tiempo que nunca llego a entender. La decepción le llegaba desde el otro lado de la puerta, no tenia objeto ya su esfuerzo, se fijo con detenimiento en el local, parecía decrepito, solitario como una calle tras el paso de un funeral, la puerta no se abría, salio al aparcamiento y lo miro de frente. Su abrigo se escurría por los hombros cediendo al peso de las gotas de agua que lo arrastraban tirando de el hacia abajo, se enrosco en sus pies enjuagando su desilusión, la lluvia la cubrió por completo mientras contemplaba la fachada ajada, descolorida y acrecentaba la sucia imagen por la oscuridad de la noche que se cernía ya sobre ella. Su vestido quedaba empapado, distorsionando los colores, perfilando su silueta que marcaba unos senos con los pezones hirientes. Sucumbió a su decepción arrodillada entre las luces de neón que intentaban aliviar el malestar de ese espacio vacío. Se sintió morir, desfallecer, su cuerpo se volvía líquido, como sus lágrimas que se fundían en un charco camino a la alcantarilla. Perdió el sentido de la orientación, del tiempo, de la temperatura se sentía desfallecer hasta que sintió unas manos que desnudaban su cuerpo y la sumergían mas en el agua, el agua estaba tibia y el calor reconfortante devolvió a su cuerpo la animación que necesitaba para poder mirar. Muchas luces de color incierto cimbreaban a su antojo, danzando sobre pies estáticos, el olor de la cera perfumada se volvía persistente y aceleraba el pulso de su corazón. No quería mirar, quería permanecer así, en el limbo, en ese limbo tan agradable que le recordaba otros días, el cielo es así, llego a pensar. El agua le caía por la espalda, la suavidad de la esponja frotaba sus hombros, bajaba por el pecho hasta el nacimiento de sus senos, sintió la caricia como si fuese impúdica, sentía como el agua penetraba en su piel, no como cuando te lavaban con la intención de limpiar que el agua se escurre antes de tocarte. Se despertó de golpe como si el recuerdo de ese tacto la hubiese devuelto a la realidad, llegas tarde, muy tarde, lo escucho momentos antes de que su corazón volviese a desbocarse, levanto su mano aferrándose a la de el, no tuvo necesidad de girar la mirada para saber que había vuelto a su redil.<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-7571807123556928402013-02-11T05:00:00.000+01:002013-02-11T09:41:12.265+01:00De tu boca forzada emerge mi intención<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8EvC7pvGWa3z6ybvUgSOI46evqc3EKyjolB2Z08Kqd0p1_fUM3Tyt81Vwbe_L9ZdZFRAr8EOgEaH0Cgw-Ua2HPcTo6vHLfkOiKySx4TCNMJ03yqHcDTFiBaeeQskF8d6Wv8qRLQ/s1600/11222_332078476910050_230538066_n.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="400" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj8EvC7pvGWa3z6ybvUgSOI46evqc3EKyjolB2Z08Kqd0p1_fUM3Tyt81Vwbe_L9ZdZFRAr8EOgEaH0Cgw-Ua2HPcTo6vHLfkOiKySx4TCNMJ03yqHcDTFiBaeeQskF8d6Wv8qRLQ/s400/11222_332078476910050_230538066_n.jpg" width="266" /></a></div>
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Es difícil airear el alma, cuando tan solo unas ráfagas de luz consiguen traspasar los poros de tu propia piel. Te contemplo intentado conversar y tus distinguidos balbuceos me cuentan por que tu cuerpo se deja vencer. Animada tu mirada consigue convencerme para que te despoje del ultimo resquicio de cordura antes de que te empuje al abismo. Me cuesta perder ese momento de efímera entereza y anido en ti como una costumbre que se resiste a perecer. Nos mostramos tal cual, desmintiendo el rumor que el viento arrastra sin importarnos si revoca al estrellarse con tu silencio. De tu boca forzada emerge mi intención, como un sueño que comienza a tejerse en tu corazón y exhalas con pegajosa y lubricante conciencia para mi orgullo.<div class="blogger-post-footer">Es un lugar para mayores de 18 Años, así que si tienes menos es mejor que cambies de lugar.</div>DaryusDYhttp://www.blogger.com/profile/11196269742286515458noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-16734122.post-31816209598245205952013-02-10T05:00:00.000+01:002013-02-11T09:41:40.095+01:00¿Como?<div style="text-align: center;">
<span style="color: #e06666; font-size: large;">Que a veces la vida se pone de color de rosa</span></div>
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